Capitulo 4

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2:36 AM


Luego de una ardua partida de UNO, ya para el momento en el que todos habían llegado y de ese fallido tour al bosque nada se hablaba, la cual terminó ganando Josefina ya que debido a su belleza a uno le costaba tirarle cualquier tipo de carta perjudicial, la palabra fue dada por Dario, quien elegantemente con su voz de barman y fina barba al estilo frances meneandose al rededor de sus prominentes labios que más de una chica y chico habrían querido besar en su momento dijo:

-Amigos y amigas, en esta noche de juegos, fiesta, conmemoracion y mucha diversión quiero recomendar que veamos "The Room", una obra de arte que nos hará a todos entender la vida como nunca antes lo hicimos.

-Me encantaría- Respondió Nacho.

Crasso error había cometido al pronunciar esa frase. no es que no le gustaría The Room, no, es que la detestaría, la aborrecería.

-Excelente- Dijo Agus, en referencia al Señor Burns.

Una enferma de los memes de los Simpson. Sin lugar a duda la persona más  obsesionada que uno podría conocer con ellos. Pero, ¿Quién podría enojarse con ella? Tenía ese pelo castaño rizado y algo enrulado que daba ganas de hacerle bucles con el dedo,  una cara muy parecida a la de su hermano solo que sin la barba, unos anteojos de margen negro que le tapaban sus ojos avellana y una sonrisa de niño dulce y feliz que habría sufrido en su momento pero que pudo seguir adelante.

Sin embargo preguntarnos quíen podría  enojarse no tiene sentido, más bien deberíamos preguntarnos, ¿Quíen podría criticarla por utilizar tanto esos memes extraños de ña serie de la familia de piel amarilla? No hace falta buscar muy lejos, su hermano, con quien compartía la sangre, el cuarto, y sus aspiraciones amorosas (las cuales eran muy fuertes con el adorable niño de flequillo) dijo:

-¡Dejá de meter a Los Simpsons en todo! ¡Mocosa!

-¡Obligame!

-Bueno, yo me voy afuera, si alguien quiere venir es más que bienvenido- Dijo Guille, y seguido a eso, abandonó la habitación y salió hacia el patio con Abril, ambos ya habían visto múltiples veces la película.


Adentro


Los adolescentes se sentaron en los múltiples sillones que se encontraban en el living frente a la televisión. Sillones nuevos debe decirse, la familia de Ignacio los habia comprado al mudarse. En el sillon principal, uno enorme y multiple, se sentaron de izquierda a derecha Dario, Germán, Lucrecia, Joaquin, Nachy, Lautaro, Claudio, Matias, Agus y Nicolas. 

En los sillones individuales, la cosa era distinta a como podria pensarse: de los tres que habia, solo uno estaba siendo usado de manera individual, los otros dos eran compartidos por las felices parejas: por un lado estaban Nacho y Carlos, este ultimo estaba sentado encima del primero, era obvio: el trasero de Nacho era mas grande que el de Carlos y hubiera sido mucho mas incomodo de la otra manera. Sentado uno sobre el otro, abrazados, el tipo de abrazos que demuestran amor, el tipo de abrazos que demuetsran comunion y el tipo de abrazos que demuestran lo hermoso y calmado que puede ser el amor.

en el tercer sillon se encontraban Tobias y Josefina, otra vez la segunda sentada encima del primero. Si Nacho y Carlos demostraban lo calmado y tierno del amor, estos dos hacian todo lo contrario: demostraban lo travieso y picante del amor, la parte erotica del mismo. Se mordian constantemente los labios entre si, y a veces tambien otras partes del cuerpo. Y antes de empezar la pelicula Tobias habia lamido suave y sensualmente a Josefina comenzando con el cuello y subiendo hasta la oreja, el punto mas sensible de la chica, lo cual habia causado una muy graciosa reaccion de esta quien solto un sonido similar a lo que Nicolas catalogaria en su mente como "un globo desinflandose", y siguio con el chico subiendo el volumen de la television.

Caida LibreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora