4: Conversación

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Trataba de concentrarse pero por mas que quería hacerlo no podía por una simple razón, esos ojos ámbar no se apartaban de ella, suponiendo que no se alejaría de ella hablo.

  —¿Mi libro?— preguntó con confusión, si bien recordaba ese libro le pertenecía a la pelimorada del parque—

—Asi es nozomi-chan me pidio que te lo entregará—su tono fue tan amable y radiante que la peliazul solo se limito a verla  —

—así que, ese es su nombre— susurro por lo bajo, de nuevo inspeccionó a la chica frente a ella, portaba el uniforme de la preparatori al igual que su moño, que era parecido al suyo, bien era un hecho aquella chica era de su salon —¿disculpa cual es tu nombre? 

—¿No lo recuerdas?  — el rostro de confusión la arquera fue señal para que la peligris comprendiera que no lo recordaba, no la culpaba de cierta manera cuando se presentó en el salon esta mañana su compañera parecía dormir— Minami kotori

  —Sonoda Umi Es Un placer— saludo de forma amistosa y formal sonriéndole un poco al final. sus mejillas no pudieron evitar teñirse de un bello color carmesí, si bien ver a Umi en persona era mejor que en la fotografía— ¿se encuentra bien?— preguntó con preocupación la arquera— 

  —S-si solo v-vine a entregarte este libro— a este punto kotori era un manojo de nervios, sus manos temblaron acción que hizo que el libro cayera al pasto—l-lo siento.

Con rapidez bajo para tomarlo, aun así no lo hizo su cuerpo no reacciono solo se quedo inmóvil al sentir el repentino acercamiento de su contraria, su cuerpo sintió la piel ajena por su hombro que viajó sin permiso hacia su mejilla obligándola a subir la mirada. la peliazul observó aquel acto donde la chica bajó por el libro, aun así el libro había caído muy cercas de ella por lo que pudo tomar libro  primero, su vista bago hasta aquel pequeño pétalo de cerezo en su flejo inconscientemente su mano viajó por el cuerpo ajeno hasta llegar al pétalo rosado.

  —Lo siento— se disculpó de inmediato, alejando su mano al ver a la chica sonrojada  e inmóvil, su mano volvió a el libro que tenía en su otra mano— Veras Dile a tu amiga que este libro es de ella.

 la  peligirs seguía en su mundo, donde aquel pequeño tacto la había hecho estremecer olvidando por completo que se encontraba demasiado cercas de la peliazul.

  —Minami-san—la arquera se encontraba en su mismo lugar solo que hace unos momentos podía moverse y justo ahora ocupaba espacio— Podrías apartarte.

  — Lo siento mucho— se disculpó con pena tomando el libro que extendía su contraria— perdon si te incomode, yo le diré a nozomi nos vemos.

y así como llegó desapareció con rapidez de la arquera, un suspiro cansado salió de sus labios y sin poderlo evitar miró de nuevo el pétalo en su mano, el cual se había negado a soltar.

  —Solo debería seguir el plan ¿no?— pronunció la peliazul, recargando su espalda en aquel arbol— 

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Honoka solo se limitó a sonreír de una manera melancólica por aquella pantalla gigantesca de su oficina, si bien su primer querubín había hecho su primer movimiento, ahora su vista se enfoca es sus pies que se movían constantemente arriba de aquella mesa.

  — Fue buena idea mandarlas chicas— susurro para ella— 

si bien sabía el riesgo que corrían sus amigas al ir al mundo humano, aquellas chicas siempre demostraron que el amor era algo innecesario, aún desconocía aquellas razones ya que ningunas de sus querubines  lograba entablar un pequeña amistad. sobre todo en aquella peliazul.

La forma fría y callada en la se comportaba hacia que se estremeciera del susto, quizás Nishikino y Ayase llamaban su atención pero esta era la que lograba quitarle el sueño.

Su nombre, su forma de ser y su actuar le parecía demasiado conocido como si ya la conociera pero eso era casi imposible ¿no?, ella era Cupido no había forma de que Sonoda la conociera aun así esa duda siempre permanecía en sus pensamiento.

  —Honoka-chan!—aquel repentino grito hizo que diera un pequeño salto del susto en su silla— fue muy malo mandar a las chicas solas.

  —Tienes razón fue malo mandarlas solas—respondió de inmediato la peligengibre— llama a Erena y anju por favor hanayo.

—Espero que no sea para nada malo— susurro hanayo quien salió de la oficina sin reprender a honoka— Perdón tsubasa, pero debo investigar mas de cercas A Sonoda Umi.

La nombra solo dio un suspiro pesado,después de hanayo saliera corriendo aprovechó la oportunidad de entrar a la oficina de su "pareja".

—¿Dejaras solo el lugar?—preguntó con sorpresa la ojiverde, tanto tiempo había pasado desde que honka había salido de su oficina, por alguna extraña razón la peli jengibre nunca salia el lugar  —

  —Dejaré a cargo a Las chicas, quizás Hanayo y la chica gato puedan ayudarme— respondió acercando a tsubasa que rápidamente se alejo— y confío en que no hagas nada malo.

 — Ese no era parte del trato— respondió de inmediato al saber las intenciones de la chica al abandonar la oficina— pero no haré nada malo, pienso ir al mundo Humano.

  —Acaso Tsubasa extrañara mi presencia— respondió divertida la ojiazul causando un pequeño sonrojo en su contraria—

  —Claro que no, pero sabes honoka quiero ganar—  el rostro de honoka pronto se volvió serio, sabía que si perdía aquella apuesta estaría acabada— ninguna de tus reglas impide intervenir en el objetivo de las chicas ¿Cierto?

  —¿Piensas engañarme? — el rostro de Tsuba mostraba sorpresa—  sabes que me amas asi que mejor dime que me amas y ya. 

un pequeño golpe en la cabeza de la peli jengibre sobresaltaba. Una tsubasa sonrojada la había herido, sin decir nada chasqueo sus dedos desapareciendo al instante dejando a honoka con una sonrisa boba, la razón,al estar en el suelo pudo notar sus piernas bien torneadas.

  —Tsuba si solo aceptaras mis sentimientos.—  con un suspiro cansado miro por aquella venta, observando solo nubes— pero si intervienen en el objetivo te castigaré..Bien kotori espero que haya espacio en el departamento....





Enamorando A Unas Densas [lovelive]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora