Mi profesor de Canto (Niall Horan & Selena Gomez)

Cartas de despedida

Había dormido toda la noche en el suelo encima de mis dos amigas, me dolía toda la espalda y el cuello. Sé que ellas, seguramente estén peor, simplemente del hecho de que han sido mi colchón. ¡ESTO ME PASA POR PONERME CALIENTE CON UN TIO!

Estaba acabando de recoger todo para poder irme ya, voy a echar de menos a mis amigas y a los chicos, pero no he vendrá nada mal un cambio. Hoy había decidido ponerme unos shorts negros con un top fucsia, no me importaba que me miraran por ir muy corta con la ropa, solo quería sentirme sexy después de lo de anoche.

Recordar como sus manos recorrieron mi cuerpo y lo bien que me sentí... lo malo es que después mis pensamientos se estropean al pensar en cómo llamo Justin y como él se marchó ¿Había hecho mal cogiendo el teléfono? ¿Lo tendría que haber dejado sonar? Bueno, no era ni soy suya, puedo hacer lo que a mí me venga en gana.

Muy cabreada mire mi pequeño cuarto por última vez y como una oleada de recuerdos me inundaron, esas tardes de lluvia cuando jugábamos  los juegos de mesa, cuando teníamos noche de chicas. Aunque también me invadieron recuerdos pésimos, como cuando creí perder a Miley, cuando a Katy la dejo Matt, la noche anterior con Niall... Supongo que todo el mundo vive cosas buenas y cosas malas, aunque haya días que lo ves todo negro o todo banco y de verdad es gris.

Cerré la puerta detrás mío y mande un mensaje a las chicas diciéndolas que me iba a la puerta principal, dude entre mandar un mensaje a los chicos y decidí que si lo mandaría, son mis amigos y no quería hacerles el feo. Guarde el móvil en los pantalones y agarre la maleta y las bolsas, nunca pensé que mi equipaje pesara tanto.

Caminando por el pasillo me encontré con Lady Gaga, la chica que se sentaba detrás de mí en las clases de canto y sorprendentemente se paró y me toco el brazo.

- Selena, ¿Es verdad que te vas?- Esa pregunta me trajo de sorpresa, normalmente nunca hablábamos. Más bien, nunca habíamos hablado de otra cosa que no fuera una tarea.

- Emm... sí, me voy en media horas más o menos - la comente mientras me encogía de hombros

- Pásatelo bien y aprovecha la oportunidad, me hubiera gustado conocerte mejor.

Nos sonreímos. La verdad es que a mi también me hubiera gustado conocerla mejor. Parecía una mujer maja, aunque un poco rara por las cosas que se ponía, no era normal ver a una mujer con la cara pintada entera y con ropa extravagante.

- A mi también me hubiera gustado conocerte mejor - suspire- quizás algún día podemos vernos.

Tras esto me despedí, ahora mismo no me apetecía hablar con nadie, solo quería abrazar a mis amigas y despedirme de ellas. Seguí caminando por el pasillo hasta llegar a al hall de entrada, allí esta Zayn y me acerque a él.

Hoy se le veía, aparentemente tranquilo, pero sus manos delataban que estaba un poco... ¿Incomodo? ¿Intranquilo? No lo sé. Deje las cosas en el suelo y corrí de tal manera que acabe colgada en su espalda y no pude evitar reír.

- Selena, Selena, Selena... la recomiendo que se baje de ahí o sufrirás las consecuencias del señor Malik enojado- ¿Señor Malik? ¿Enojado? ¿Qué me baje? No evite soltar otra carcajada, pero no la pude acabar ya que acabe en el suelo. Auch.

- ¡MALIK! ¡GOMEZ! - La secretaria gritaba desde su mesa, y al parecer estaba muy muy enojada - ¡HASTA EL ULTIMO DIA ARMANDO JALEO! ¡LEVANTENSE DE AHI O SERAN GUIADOS A JEFATURA!

Zayn me ayudo a levantarme y comenzamos a reír, la secretaria siempre estaba de mal humor y no entendía el porqué, lo peor es que la tenía tomada conmigo y por lo tanto con mis amigos. Pude notar en la nuca la mirada de asco que nos hecho y eso, no sé porque, pero me hacia feliz.