Cap 1 Reglas pasadas y problemas recientes

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Todos tienen una época favorita del tiempo en que han estado vivos, una etapa en la que se sentían felices y cómodos. Esas épocas uno suele lograr reconocerles cuando ya se es adultos, cuando la vida te da la experiencia para diferencias las cosas que apreciar en ese momento y un ahora.

Boruto sabía exactamente que momento era ese, aún a su joven e inexperta edad.

Considera que su vida fue perfecta hasta el momento en que su padre se convirtió en Hokage.

Boruto podría tener 7 años, pero no era tonto. Podía notar las diferencias en su vida a una milla de distancia y honestamente no le gustaban.

Boruto se crió en una casa linda con una familia grande y amorosa.

Muchos considerarían que una familia de 4 personas en realidad no era una familia muy grande, pero Boruto consideraba tener más familia que sólo sus padres y su hermana.

Para Boruto la familia Uchiha era también su familia.

Su tío Sasuke, la tía  Sakura y sus hijos, Sarada la mayor que tenía su edad, Menma de la edad de Himawari y el pequeño Charasuke, sólo un año menor que sus otros hermanos.

Boruto amaba a todos y le encantaba pasar tiempo con ellos, incluso amaba sus peleas fraternales con Sarada, pues por mucho que pelearan entre ellos, a la hora de defenderse de otros podía contar con que la niña alfa respaldaría su trasero.

Los pequeños Menma y Charasuke eran algunos de los amores de la vida de Boruto junto con la pequeña Himawari. Aunque Boruto aveces los podía hacer enojar y honestamente era un poco mocoso con ellos, básicamente era una mamá gallina con los cachorros. Adorando todos y cada uno de sus negros cabellos.

Quería mucho a su tía Sakura la cual era una beta muy cariñosa, gustaba aprender cosas útiles de ella y aunque no apreciaba tanto la cocina como Himawari eso no lo hacía menos habilidoso. Sólo algo flojo si lo ponían en tela de juicio.

Entonces estaba su tío Sasuke.
Para Boruto era como un segundo padre. Siempre había existido una afinidad entre ellos y Himawari que ninguno de los niños pudo explicar.

Sasuke los trato como si fueran sus propios cachorros, cada ocasión que estaba de regreso de una misión  o un viaje particularmente largo iba a por todos, los niños Uzumaki y los Uchiha; y compartían cierto tiempo mientras el alfa cocinaba la comida para la enorme camada de cachorros.

Aunque Boruto amaba la comida de su propia mamá  no podía escoger lo que preparase Hinata sobre una buena sopa de tomate de Sasuke, ninguno de los cachorros podría elegir la comida de sus madres por sobre la del Alfa Uchiha.

Durante todo ese corto tiempo de sus 6 años de vida,  Boruto se encontró deseando que su vida jamás  cambiará.

Que pasaría todos sus días con sus pequeños cachorros.

Que sus padres siempre jugarían con ellos. 

Que los Uchiha y los Uzumaki no se separarían por nada.

Y entonces su padre se convirtió en Hokage.

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Esa mañana Hinata se levanto temprano y con alegría, este era el día en que a su esposo al fin lo ascenderían a Hokage, el séptimo de la aldea y el segundo en la familia. Ella despertó con el solo propósito de arreglar los últimos detalles para que todo saliera según los planes.

La siguiente en despertar fue la pequeña Himawari, siguiendo su rutina para ayudar a su madre a preparar el desayuno,  pues en realidad eran muchos los que iban a tener que alimentar. 

Por Nuestros ErroresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora