-Sigo esperando. –Dije cuando llevaba un buen rato callado apoyado contra el árbol.
-Amaya, no es el momento. –Murmuró él momentos después. –Vamos, sube, que te llevo a la fiesta de ese tal Pablo.
-No sin antes la explicación.
-Entonces vete a pie.
-Adiós.
Me giré y empecé a andar por la carretera por la que habíamos venido. Después de unos diez minutos andando me vi obligada a sacarme los tacones porque los pies me dolían demasiado. Seguí caminando maldiciendo haber conocido a Josh, pero entonces escuché el motor de una moto detrás de mí. Poco después vi a Josh a mi lado. Me paré y lo miré.
-Vamos Amaya, súbete.
-Josh, por favor… Dime qué ocurre.
-No soy como crees, ¿vale? –Dijo él mirando al cielo con los ojos cerrados como tratando de no recordar algo.
-¿Por qué?
-Es muy largo, demasiado.
-Vayamos a la fiesta de Pablo y me lo explicas allí.
-Me lo pensaré.
Volví a ponerme los tacones sintiendo la mirada de Josh fija en mí y él me tendió el casco antes de que me subiera detrás de él. Lo acepté sin rechistar ya que sabía perfectamente que si le decía que no, él volvería a conseguir que me lo pusiera. Subí detrás de él y abracé su cintura como antes, pero con la diferencia que ahora tenía miedo del desconocido al que me estaba sujetando. El recorrido fue bastante incómodo para mí ya que, cada dos por tres, Josh fijaba su mirada en mí por el retrovisor y me pregunté si estaba pensando lo de si me lo explicaba o no. Finalmente llegamos a casa de Pablo dónde la música se oía hasta fuera. Josh aparcó la moto y yo le cogí de la mano para llevarlo a la pared de la casa de Pablo, tratando de ocultarnos en la oscuridad.
-¿Me lo vas a explicar?
-Eres pesada, eh.
-Cabezota. –Le corregí.
-Mira, ¿recuerdas que estuve un tiempo sin hablarte?
-Pues claro, justamente ese tiempo fue con el que estuve peor con Mario.
-Perdón… -Se disculpó.
-Nada, hombre. –Dije apoyándome a la pared. –Sigue explicando.
-¿Sabes quienes son los UJ?
-¿Los qué?
-Los UJ.
-No… Ni idea.
-¿Unidad de Justicia? –Volvió a probar. Me limité a encogerme de hombros en desaprobación. –Es un partido Español que se encuentra en California y existe desde tiempos inmemorables. Son gente que lo único que busca es dinero, poder y lo que ellos llaman “justicia”.
-¿Y a qué viene esto?
-Déjame acabar. El día de la triatlón, que quedé en cuarto lugar (sí, es jodido quedar en ese puesto), unos integrantes de la UJ me cogieron y me obligaron a seguirlos.
-¿Cómo te pueden obligar si tú no quieres?
Me miró fijamente y yo lo entendí de golpe. Con armas.
-Oh, e-entiendo…
-Ellos me “pidieron” –marcó comillas con los dedos e hizo una mueca de rabia. –que guardara unos planos suyos y que, si los perdía, matarían a mis seres queridos y a mí me harían tanto daño que ni me lo puedo imaginar.
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Internet friend
RomanceTodo empezó con un simple mensaje. Un mensaje que marcó el comienzo de toda la historia. "Cógete fuerte a las riendas del destino, son imparables."