Twilight And Harry Potter crossover BL Crepúsculo (TERMINADO)

Planes

Los tres estaban sumamente alertas, escuchaban cada sonido del bosque, escrutaban cada sombra, captaban cada olor, todo en busca de cualquier cosa que estuviera fuera de lugar.

Tenía mi varita en la muñequera que siempre llevaba para sacarla al primer movimiento en falso, agradecí mentalmente a Moddy y su vigilancia constanteconstante.

Escuche como los demás se movían a mis espaldas buscando cualquier movimiento sospechoso y aclarando su plan, pero yo ya tenían el mío propio y consistía en darle caza a ese vampiro matarlo y tener a Teddy en mis brazos lo más rápido posible.

—Alice, Emmett —espetó Edward con autoridad.
Ambos se deslizaron en la oscuridad en el más completo silencio y desaparecieron de inmediato.

Edward me miró a la cara mientras salíamos de la casa y me tomó de la mano, amparándome en su abrazo protector.

—Te quiero —me dijo con voz baja e intensa—, siempre te amaré, no importa lo que pase ahora.

—No va a pasar nada, Edward —le respondí con igual ferocidad.
—Sólo te pido que sigas el plan, ¿vale?.

Edward estaba inclinado, por lo que sólo tuve que ponerme de puntillas para besar sus labios fríos, desprevenidos, con toda la fuerza de la que fui capaz.

Ya tenía un bolso de emergencia por si las cosas se complicaban.
Así que lo tome y salí de la casa cerrando la puerta bien y poniendo un hechizo protector para que a ese vampirucho no se le ocurriera entrar.

Encendí el motor y arranqué. Edward me tocó la mano.

—Detente en el bordillo —me ordenó cuando la casa desaparecieron a nuestras espaldas.

—Puedo conducir —le aseguré.

De forma inesperada, las grandes manos de Edward me sujetaron por la cintura, su pie empujó al mío fuera del acelerador, me puso sobre su regazo y me soltó las manos del volante.
De pronto me encontré en el asiento del copiloto sin que el automóvil hubiera dado el más leve bandazo.

—No vas a encontrar nuestra casa —me explicó.

Unas luces destellaron repentinamente detrás de nosotros.
Miré por la ventanilla trasera.

—Es Alice —me dijo, tomándome la mano de nuevo.

— ¿Y el rastreador?

—Nos esta siguiéndo.
Ahora está corriendo detrás de nosotros.

— ¿Podemos dejarle atrás?

—No —replicó, pero aceleró mientras hablaba.

El motor del coche se quejó con un chirrido.
De repente, el plan había dejado de parecerme tan brillante.

Estaba mirando hacia atrás, a las luces delanteras de Alice, cuando el coche sufrió una sacudida y una sombra oscura surgió en mi ventana.

Mi primera reacción fue tener varita en mano preparado para Crucciarlo si hacia falta.

— ¡Es Emmett! Apretó mi mano para que me relajada y me pasó su brazo por la cintura.

Corrimos a través del pueblo tranquilo hacia la autopista del norte.

—No me había dado cuenta de que la vida de una pequeña ciudad de provincias te aburría tanto —comentó Edward tratando de entablar conversación; supe que intentaba distraerme—. Me pareció que te estabas integrando bastante bien, sobre todo en los últimos tiempos.
Incluso me sentía bastante halagado al pensar que había conseguido que la vida te resultara un poco más interesante.