Amor con Colmillos ©

Cuida tu espalda - Parte 1/2

(...Narra Alexia...)

Aggg....está sonando mi celular pero no quiero contestar...<<¡Estaba soñando con Zac Efron!>> Sigo sin abrir los ojos y prefiero quedarme así, sin levantarme y no tener que afrontar lo que viene, pero así no soy. Así que no esperé más y aún con los ojos cerrados cogí el celular que se encontraba en la mesa de noche.

- ¿Hola? - dije con voz adormilada y aún con los ojos cerrados.

- Alex necesito que nos encontremos en casa de Elena ¿puedes? - dijo una voz femenina muy familiar, pero como me encontraba con mucho sueño, no la reconocí.

- ¿Quien habla...? - dije mientras bostezaba. Aún seguía con los ojos cerrados, pues me daba flojera abrirlos y enfrentar la luz en mis ojos.

- Soy yo, Bonnie...¿Alex estás bien?

- Lo siento...es que tengo sueño...-dí un pequeño bostezo.

- ¿Puedes llegar en hora y media? - preguntó mi amiga.

- Ajaa....¿que hora es? - seguía con los ojos cerrados.

- Son...- hizo una pausa - las 8:15 ....

- Ok...estaré ahí. Bye Booon. - Así le decía para fastidiarla de broma.

- ¡Sabes que no me gusta ese apodo! - levantó la voz mientras a la vez reía.

- Chaito...- y colgué.

Decidí dormir unos 5 minutitos más, ya que como todavía no abría los ojos, no me costaría tanto volver a conciliar el sueño. Estaba echada en mi cama y me cubrí con las sábanas. Decidí acomodarme mejor y busqué a ciegas una almohada para dormir mejor. Ya estaba casi dormida de nuevo y estiré un poco el brazo, hasta que me abracé a algo. Se sentía muy cómoda y estaba a punto de retomar el sueño, pero una voz me despertó inmediatamente.

- ¿Soñando conmigo? - dijo una voz gruesa y profunda, que reconocería fácilmente...Damon. Inmediatamente me levanté y tiré un grito.

- ¡Que haces aquí Damon! - dije mientras recuperaba el aliento.

- ¿No es obvio? Te sirvo de almohada....- habló mientras una sonrisa torcida cruzó su rostro.

- ¿Hace cuánto estás en mi habitación? - Ignoré su comentario.

- Hace...uhmm...Claro que te adoro Zac Efron...- mi cara se sonrojó y me metí entre las sábanas mientras le daba la espalda. - ¿Enserio te parece lindo?

- ¿Y a quién no? - le seguí el juego. Mientras me levantaba a duras penas y me dirigía al baño a cepillarme los dientes y el cabello. Me demoré unos 5 minutos y al salir, Damon se encontraba husmeando entre mis cajones. - ¡Hey! ¡Suelta eso! - reclamé mientras le quitaba un brassier negro de entre sus manos.

- Deberías usarlo...- y siguió inspeccionando el resto de mi habitación.

- Ya dime en serio...¿que haces en mi habitación y sin mi permiso?

-Vine a saludar y a decirte algo... - al decir lo últomo, su voz cambió de tono por una más seria.

-¿Decirme qué?

- Le pedí a Bonnie que haga un hechizo para encerrar a Elena en su casa...- dijo como si nada.

- ¡¿Qué hiciste qué?! ¡Damon eres...! - pero me interrumpió.

- Shhh....- puso su dedo en mis labios y volvió a hablar. - Es para que no vaya a hacer una locura en estos momentos.

- ¡Damon supera ya lo de ayer! Lo hizo para intentar protegerlos...y no la culpo...-me miró extrañado-...espera, pero tampoco la felicito.