¡No hay sexo en frente del perrito!

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- Mmm~ ya que estamos solos...

El chico tomo a la chica de las caderas y la subió en sima de la mesa de la cocina mientras comenzaba a restregar sus sexos opuestos. Gemidos abundaban en la habitación. El chico se bajó los pantalones junto con su bóxer. El chico aprovechó que la chica en esos momentos llevaba una falda así que la levanto levemente, tomo la braga de la chica y la hizo a un lado sin quitársela y la penetro suavemente hasta que el ritmo se volvió brusco y fuerte haciendo rechinar la mesa. Todo iba espléndido el sexo esa tarde en la cocina estaba siendo de lo más excitante hasta que apareció el perrito de la chica en la cocina donde ellos estaban teniendo sexo.

- guau guau guau!!- el perito no dejaba de ladrar a ambos sujetos.

- Amor, vamos a la habitación.... ahhh!!

El chico no quería escucharla decir "habitación" ya que siempre que ese bicho aparecía en la cocina o donde fuese tenían que ir a la "habitación" así que aumentó el ritmo de sus penetraciones.

¡Al carajo con el chingo ese! ¡A coger sexo hasta por las orejas así el aprende también! ¡Que le rompa la vagina de tanto penetrar fuertemente y a el que se le gaste el pene! Ok sé que se escucho muy cafés pero a mí me vale madres🤷🏼‍♀️.

Historias que te harán sacar canas verdes🤢🤢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora