capítulo 5 uno y uno igual a tres

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El verano por fin estaba aquí,con su abrasador calor,su olor a césped y cloro,pero este no iba a ser como los demás.

Me pasaba el día entre las clases y la casa de Jeray,sin sobresaltos,estudiando para los finales y estudiando cada cm de su cuerpo y de su alma.

Me parecía mentira que aquel chico que dormía a mi lado acurrucado en el sofá fuera aquel capullo que me había roto el corazón,pero todo había pasado,ahora éramos una pareja feliz,apenas discutíamos y si lo hacíamos a los pocos minutos ya estábamos comiéndonos a besos.

Hacía unos días que me sentía algo rara,pero pensé que serían los nervios de los exámenes,incluso cuando mi regla no venía lo achaqué al estrés,pero ya había pasado demasiado tiempo.

Justo debajo de casa de Jeray había una farmacia,así que me armé de valor y bajé decidida a comprar un test de embarazo.

-Hola buenas tardes,en qué puedo ayudarte?-una señora de pelo negro y lacio me sonrió como si hablase con un bebé.

-Hola,quería...esto...

-No te avergüences guapa,qué quieres condones?-me dijo risueña la dependienta.

-Ojala....más bien un test de embarazo.

La mujer hizo como si nada,pero yo me di cuenta que en sus ojos había sorpresa y algo de pena.

-Aquí tienes,sabes cómo funciona?

-No,pero me leeré el prospecto gracias.

Pagué los 11 euros y lo metí rápidamente en mi bolso,no quería que nadie me viese con aquello entre las manos.

Mi corazón palpitaba a mil por hora,parecía que se me iba a salir de la boca.

Me encendí un cigarro y me dispuse a leer el papelito de la caja,era bastante sencillo la verdad,pero no sabía si con los nervios iba a atinar con el chorrito en el chisme.

Me tomé unos minutos y me dispuse a ir al baño,bajé mis mallas,me puse sobre la taza y comencé a hacer pis ...1,2,3,4,5......ponía que había que estar unos segundos para que pudiera analizarlo bien.

Dejé el predictor sobre la bañera y me senté a esperar.Fueron los 3 minutos más largos de toda mi vida y lo peor es que algo dentro de mí me decía que no iba a ser los únicos.

Dos rayas...eso que era?...rápido miré la cajita que asomaba de la papelera...EMBARAZADA.

-Noooo-dije en voz alta aun estando sola.

No podía ser verdad,seguro que los nervios habían alterado el resultado y...Pero qué decía,estaba claro que eso no afectaba en absoluto.

No sabía que hacer,pensé en llamar a Jeray,pero dormía plácidamente y seguro que ni en su peor pesadilla se imaginaría esto.Me senté a su lado y le acaricié el pelo suavemente.Al rato abrió los ojos,una sonrisa,un beso.Y yo...no sabía ni qué decir.

El en seguida notó que estaba extraña.

-Qué te pasa mi niña?

-Nada,,

-Venga anda no me mientas

-Bueno,la verdad es que...si me pasa algo y es alqo...

Creo que mi cara dijo más que mis palabras porque Jeray en seguida me dijo

-No me irás a decir que....-su cara empalidecía por momentos.

-Estamos embarazados mi amor.

Se hizo el silencio...

prólogo y capítulo 1: adiós al veloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora