HILO -NAMV-

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Fue entonces cuando todo mi mundo cambió, de verdad, fue como si apareciera el momento exacto, cuando todo estaba por terminar. Cuando la soledad dolía mas...

Fue tan simple como un mensaje, ¿Pueden creerlo?

@TaeTae: Wow!!! Tus fotografías son asombrosas!! Lo que daría por poder hacer arte de esa manera TTwTT continúa subiendo más contenido!! De verdad tienes mucho talento!!

Siempre había sabido de mi habilidad para la fotografía, no era presumido ni nada, pero conocía el valor de mis habilidades, aun así, ese mensaje logró conmoverme, así que decidí responderle, todos esos signos de exclamación mostraban realmente su emoción por mi trabajo y no quería hacerle el feo de no responderle, también tenía mi corazoncito, a pesar de casi estar muerto en vida (lo sé, soy bastante muy exagerado). En fin, había respondido el mensaje.

@NamMonie:

Hey! Gracias, la verdad me hizo sentir muy bien tu mensaje, me alegro que te haya gustado mi trabajo :3

@TaeTae: OMG!OMG!OMG!OMG! Me has respondido!!

Joder, siento que este es el momento de mi vida!! MAMA TOMA UNA FOTOGRAFIA ESTOY HABLANDO CON NAMMONIE!!!

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*se desmaya desmayadamente*

Definitivamente no estaba preparado para tal efusividad, sin embargo me causo cierta ternura, jamás pensé que los seguidores de mi trabajo realmente lo admiraran demasiado, con la depresión que constantemente parecía perseguirme; no tenía ganas de interactuar con nadie, mucho menos en mis redes sociales, y solo de vez en vez subía alguna fotografía, quizás por eso la emoción de Tae al ser respondido.

Fue así como había iniciado, sin darme cuenta cada día nos hablábamos, aunque sea una vez al día, siempre por mensajes, Tae me dijo que era de Daegu, yo en ese entonces estaba en Seúl. Admito que más de una vez me entraron ganas de verla... de acuerdo, apenas comencé a acostumbrarme a Tae ya quise verla, pero nunca me atreví a decírselo, ella también tenía a alguien allí afuera que la esperaba, ¿Cómo podría luchar contra ello? entonces me volví un total conformista, los mensajes de buenos días, de buenas noches, los apodos tiernos, todo lo absorbía y lo guardaba, eran pequeñas cosas que atesoraba. No supe cómo ni cuando, pero había terminado completamente enamorado de Tae, pero todo parecía tan correcto con ella. Tan natural...

Y me encantaba, dios, jamás había sentido algo así, era como un vértigo cada vez que escuchaba aquel tono especial de gatitos que le había puesto, sin contar de las horas y horas que me pasaba pegado al teléfono, comencé a frecuentar más mis redes sociales, comencé a subir más fotografías, y me empeñaba en siempre subir las mejores para recibir algún elogio suyo.

Mi vida realmente parecía haber cambiado, comenzaba a sonreír más, incluso mis ausentes padres lo notaron, ya no parecía tener aquel resentimiento contra la vida misma.

Había cambiado.

Me había convertido en alguien mejor, al menos yo lo pensaba así.

Había dejado atrás aquel racional y analítico Nam Joon, aquel que creía que el amor no era más que un par de procesos bioquímico. Una simple liberación de dopamina y serotonina (*) en el cerebro, sí, así de frío me había vuelto, pero como les he estado narrando, con la llegada de Tae todo había cambiando.