Capítulo 2

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Sentados en una de las mesas del bar se encontraba Min Yoongi con un hombre su nombre era Lee Seong-il otro personaje más pero comparación con Yoongi es que este tiene antecedentes.
Rodeados de copas de alcohol en la mesa estaban los dos hombres disfrutando de la buena música y del buen trago. Su amigo sostenía su copa en la mano y se dirigió a él más cerca para comentarle algo que estaba planeando.

-Yoongi, te conozco de las calles y sé que eres un haz con ésto de las manos rápidas, pero se que tienes más potencial.

Dijo Seong-il tomando su copa y aludiendo a Yoongi, él muestra su interés y se acerca más para plantear su postura muy interesado e intrigado.

—Seong-il, ¿A qué te refieres?.
—Me refiero a qué tengo un plan para llevarnos al otro nivel. Sabes ésto del carterismo me está aburriendo un poco, ya me cansé de los Rolex de los anillos de las pinches cosas que obtenemos que solo nos entretienen.

Yoongi demuestra algo de gracia.

—oh, vamos, por favor!, ¿Sólo nos entretienen? Eso nos sacó de la miseria, amigo no sé de qué hablas.

Seong-il se acerca a él con una expresión más seria y dejando su vaso a un costado.

—Escúchame Yoongi, tengo algo que nos llevará al otro nivel y solo falta que aceptes.

Actuando de forma muy directa Seong-il mueve sus brazos y practica gestos de admiración.

—Amigo, ya tengo gente, sólo me faltas tú, oh vamos!, Eres el mejor de la ciudad y no tienes antecedentes.

Él ríe esporádicamente.

—Eres como un vírgen, y este trabajito sería como desvirginarte del carterismo tedioso y aburrido y metámoles acción a ésto. Eh!, Qué tal!.

Yoongi tiene una expresión de incredulidad pero fascinado ante la propuesta de su amigo.

—Ok, Ok, pero..., ¿de qué trata?.

Su amigo pibe una mirada calculadora mirándolo fijamente y dejando un espacio de silencio ante su pregunta luego se le acerca y le dice a su oído.

—Asalto a un blindado.

Los ojos de Yoongi se dilataron morando su rostro calculador. Totalmente atónito y estupefacto.

—Pero Seong-il eso es demasiado arriesgado.
-Que vale la vida sin riesgos.

Tomando un último trago, Seong-il se levanta de la silla y da la espalda para continuar su camino antes de eso hace un alto y vuelve a mirarlo diciéndole en voz alta...

—Sólo faltaría tu colaboración, aquí te dejo el lugar de la reunión.

Con estilo presuntuoso

—ya sabes amigo!, Para organizar la fiesta.

Sin más ni más se retiró dejando inquieto a Yoongi. Él observa el papel escrito con una dirección donde al parecer sería la reunión para planear el atraco, él la mira y ríe ante la situación, tiene una mirada pensante y calculadora, guarda el papel en su bolsillo.

Inquieto por la situación trata de distraerse hasta mientras, pues la reunión decía en la tarde del día siguiente así que podía relajarse un momento con el ambiente.

Él comienza a observar a las personas del lugar percatándose de los distraídos y los atentos, comienza a trazar un plan para obtener algo nuevo, trata de ser lo más precavido y pasar desapercibido una vez que extraiga cualquier objeto, pero a él se le antojó hacer algo sólo para no pagar un trago, pues se le había antojado un trago de una bebida alcohólica muy famosa pero cara que obviamente no podía pagar en ese momento si no es con una tarjeta de crédito. Sólo un trago de la cerveza Vieille Bon Secours Ale, que se pagaría sola con una tarjeta que él no poseía pero el amigo de la barra distraído sí.

Su billetera se ubicaba en el bolsillo de su saco, en el bolsillo lateral que caía por su cadera, el objetivo estaba coqueteando con una mujer que lo tenía muy entretenido.

Él se acerca muy ágilmente para poder tomar su tarjeta, toma la billetera y la coloco debajo del mesón para no hacerla visible ante el dueño, una vez obtenida guarda la billetera en su pantalón se aleja un poco y pide su antojo pagando con la tarjeta una vez que pasó le devolvió y Yoongi la colocó en la billetera para luego tomar su trago y devolver la cartera a su dueño en su sitio, así como se levantó se alejó con su trago, dejó el vaso mientras caminaba en medio de las personas que bailaban y se embriagaban, se le acercaban mujeres que querían estar con un cliente más, el continúa su camino escuchando los reclamos del pobre hombre que quiso pasar su tarjeta una última vez para deslumbrar a su conquista, pero le dijeron que no había lo suficiente para pagar, su conquista se fue y él aún no entendía que pasó y Yoongi con una sonrisa calculadora en su rostro.

Atentado en Big Hit 1® (La Ambición es más grande que la razón)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora