Atentado en Big Hit 1® (La Ambición es más grande que la razón)

Capítulo 18: El Atentado en Big Hit

Continuación...

—Por favor no le hagas nada a mí familia..., Suplicó Choi entre lágrimas y sollosos.

El otro atracante terminó de atar al hombre en su silla dejándolo amordazado y para inmovilizarlo más, ató la silla rodante a la manija del cajón del archivero con esposas.

—Desactiva las cámaras y las alarmas right now!,..., Fue así que con nervios Choi acataba las órdenes del atracante sin bacilar no intentar nada para alertar a los demás.

El señor Choi les advierte que están subiendo el otro turno y que tarde o temprano se darán cuenta de lo que pasa, a lo que el atracante respondió...,—De eso no te preocupes amigo!.

De inmediato las puertas de abrieron el el segundo atracante disparó en el pecho, cabeza, cara y demás partes vitales al grupo de guardias que entraban, matándolos y dejando un gran rastro de sangre dentro del salón., De inmediato el primer ladrón avisa a Yoongi por su micro...,—Suga, todo despejado entren por el ala sur, ya no hay seguridad.

El ala sur del museo era un edificio pequeño que conecta al ala norte que es la que está en funcionamiento y dónde están todas las reliquias, el ala sur era la parte donde años atrás era el museo solo que con un espacio muy pequeño para todas las reliquias fue así que se extendió y esa parte quedó sellada a escepción de un pasillo que funciona como salida de emergencia pero para atravesarlo se debe desactivar esa seguridad, ya que, estaban llenos de lazer's rojos que accionan alarmas de seguridad en caso de algún intento de robo o penetración al ala norte.

Mientras que Suga estaba entrando otros el el techo en la cúpula de cristal aguardaban a cualquier situación en la que deban actuar.

—Estamos listos para entran al salón de joyas, ya estamos adentro, desactiven la seguridad de ahí.

Entonces el atracante de salón ordenó a Choi que lo hiciera.

—Suga, puedes entrar, tomen todo lo que más puedan sus manos tenemos 20 min suficientes para limpiar ese salón, no hay más vigilancia escepto la mía y la de...., ¿Me puedes decir cuál es tu nombre querido amigo?..., Le dijo inclinándose a su oído y con un tinte de sacarcasmo sin apartar el arma de su cabeza.

El señor aguardó 3 segundos en silencio, sollosando, nervioso y tartamudeando luego respondió...,—Mi nombre es  Kim Choi Jung.

—Bien señor Choi, si quieres vivir y ver vivir a tu familia harás lo que te diga cómo lo estás haciendo hasta ahora o si no terminarás ahí, mira, gira tu cabeza.

Entonces el atracante giró la cabeza del guardia con forcejeo para que mirara con el otro atracante apilaba los cuerpos muertos de los guardias de turno.

—Ahora concéntrate en hacernos las cosas fáciles.

Mientras transcurrían los segundos Suga y su gente aprovechaban al máximo para tomar lo que más podían y lograr llevarse todas las joyas del primer salón. En el salón de vigilancia la tensión no cesaba entonces el señor Choi un poco más tranquilo le pregunta al tipo del arma.—Por qué hacen ésto?,  ¿Acaso no conocen lo que es trabajar?.

—Nosotros no lo hacemos por vanidad ni codicia, lo hacemos por una causa que implica al mundo entero.

—¿Que causa puede ser esa si no es para enriquecerse, son terroristas, acaso ¿Donarán el dinero para alguna fundación o qué?.

—De hecho con éste atentado salvaremos muchas vidas es lo que te puedo decir en caso de que vivas eso dirás a los medios cuando cuentes ésta experiencia, si es que logras vivir y no se me resbala mi dedo en mí arma y entierro por accidente una linda bala en tus cesos. Basta de charlas se terminó!.