✶Y ella poseía una belleza inigualable, que ni en las profundidades donde duerme aquel ente muerto encontrarán.
Su voz se perdía con el zumbido de la multitud asfixiante y sólo se escuchaba cuando el ruido en su mente era cada vez más tenue.
La perfección no estaba presente en su cuerpo, pero derrochaba pureza en su alma;
e incomparables eran los rubíes que tenía por ojos.
Y con esto he de afirmar:
Que los Ángeles debieron haber sido las criaturas más sorprendentes después de ella.
Con luminosidad propia hacía de un camino perdido uno de esperanza.
Y tras la primera mirada suya, llenó cada rincón de mis pensamientos más profundos.
Perdida busca un lugar donde pertenecer y por calles tristes y silenciosas se escucha el eco de su corazón. Y vaga sola mientras que los hermanos de huitzilopochtli brillan en el cielo.
Hermosa doncella, en mis sueños has de viajar y encontrarnos; pues no hay lugar en el universo real para verle. Y la imagino y su imagen me ata al mundo onírico, infinitamente.
Dulce dama, sería usted la envidia de las diosas griegas que si han de verle un día, tomaría el lugar de medusa.
Y miles de hombres habrían de querer rescatarla.
Las estrellas se alinean a la llegada de los seres antiguos que traerán consigo el caos y sin embargo...
Hoy tras la tortura de no tenerle (que es más cruel que todo lo demás) me atrevo a escribirle, a imaginarla en vagos recuerdos, a soñarla...
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៛¤Poesía Onírica¤៛
PoesíaPoemario sobre lo que son y lo que no suelen ser los sueños. Para aquellos que sueñan y para los que desean despertar.
