________Capítulo 6________

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Estaba hipnotizada viendo las perfectas curvas que me ofrecían su cuerpo. Sorpresivamente él volteó para encontrar mi rostro en un estado  de lujuria y shock, no sabía ni cómo reaccionar me había atrapado mirándolo sin quitarle la vista de encima, enserio que mi piel grisácea se torno carmesí ante la mirada de Jason el cuál sólo sonrió con malicia.

—No sabía que habías despertado— dice él con total inocencia tomando la toalla para volver a cubrirse.

Y yo sólo estaba ahí entre las sábanas observando cada detalle de su cuerpo tratando de articular alguna palabra pero no me salía nada, menos mal que lo que pensé sólo lo dije en mi mente.

¿Qué demonios hago aquí Jason?
Fue lo primero que solté para salir de mi letargo.
¿Acaso tú y yo?

Ya quisieras fue lo que dijo el engreído, enserio voy a terminar golpiándolo.

—Créeme preciosa si hubieras estado conmigo jamás lo habrías olvidado.

¿Puede haber alguien más presumido?
Estoy empezando a perder la paciencia con Jason pero no quiero ser grosera después de todo no fue tan mala noche.

¿Dónde está mi uniforme tengo que irme?

—Lo siento hermosa tú uniforme se quedó en el restaurante, te lo daré cuándo nos veamos otra vez.

¿Y tú creés que habrá una próxima?

Se acercó que mí y no pude evitar sonrojarme nuevamente, él sólo cargaba unos pantaloncillos dejando ver su buen tonificado torso —cuánta sensualidad se desborda de su cuerpo—

Cortando la distancia entre los dos me dijo al oído "Yo sé que así lo deseas Rachel"

No estés tan seguro le dije.

Él me miro a los ojos y luego me besó en la mejilla, nos vemos pronto.
Fue lo único que dijo antes de marcharse de la habitación.

Me quedé embobada por la cercanía de Jason que se me olvidó por completo el lugar en dónde estaba y la hora que era, 6:30 AM ¡demonios! debo llegar a la Torre. Abrí un portal para dirigirme a mi habitación a ducharme pero enserio necesitaba una taza de té.

    Raven había llegado a la Torre apareciendo justo en la cocina para prepárarse una taza de té, iba tan entretenida que ni cuenta se dio que alguien la observaba.

¿Qué son éstas horas de llegar Rachel?
Dice Richard sentado en una silla de la cocina.

Rachel levanta la mirada y ve a Richard allí sentado cómo si fuese su madre esperándola después de una fiesta.
Raven sólo arquea una ceja, se había olvidado por completo de la existencia de Nightwing.
Jason cumplió, la había hecho olvidarse de todo y entre en medio de sus recuerdos con el ladrón se le escapó una sonrisa.

¿Qué es lo gracioso Rachel, aún no me dices por qué llegas a estas horas?
¿Con quién estabas? Le pregunta Richard al ver que Raven traía un vestido elegante que por cierto no pudo evitar admirar, ese vestido la hacía lucir muy sexy y precisamente por eso estaba algo alterado con  suponer que su Raven había estado con alguien más, el sólo hecho de pensarlo lo traía loco.

Con un demonio Grayson tú no tienes ningún derecho de meterte en mi vida. Dijo Rachel furiosa al ver el cinismo que tenía Dick al reclamarle algo cuándo ella nisiquiera le había mencionado algo por lo de Koriand'r.

Lo siento Raven yo no quería gritarte, es sólo que no puedo te imaginarte con alguien más.

Lo que yo haga con mi vida no tiene porque interesarte en fin que tú haces con la tuya lo que te da la gana.

Raven enserio lo lamento no pude evitarlo, ella no lo sé no me puedo controlar, es ardiente esa mujer, es es...

Cállate Richard no quiero seguir escuchándote si tanto te gusta quedate con ella al final tú y yo no somos nada.

Pero Raven yo siempre te he querido.

    Dicho esto Nightwing no pudo contenerse más, agarro por sorpresa a Raven la sujeto por cintura y la besó apasionadamente en los labios, había esperado tanto por el momento que no pudo resistirse y menos sí el vestido que ella traía puesto sólo le decía que tenía que arrancárselo de encima.

Raven por su parte se dejó llevar por el beso que en segundos le brindaba Nightwing. Cómo negarse a ese beso tan anhelado, ella estaba enamorada; él era su amor, él era su, espera ¿qué?

Kori tú me vuelves loco —dice Richard mientras besaba a Rachel ya casi sobre la mesa de la cocina—

¿Qué es lo que acabas de decir Richard?

Que me vuelves loco Kori.

Rachel le da una cachetada a Richard sacándolo de su frenesí.

Ra-Raven.

Yo no soy la mujerzuela esa con la que te enredarste.

No le digas así, no la conoces.

¿Y tú sí la conoces Richard?

Claro que sí y por eso creo que esto es un error.

¿Me estás diciendo que soy un error?
Madita sea Richard eres un imbécil. Después de tantos años me dices que soy un error, sabes que haz lo que quieras sólo no vuelvas a meterte en mi vida aquí yo llego y salgo a la hora que se me de mi endemoniada gana y si no te gusta me largo hoy mismo.

Richard no supo que decir ante las palabras de Rachel, sabía que lo había arruinado una vez más. Pero que carajos podía hacer, como iba a decirle que le gustaban las dos pero que si Kori aparecía se volvía totalmente loco.

Dick hizo lo más sensato que se le ocurrió que fue decidirse por una de las dos pero desafortunadamente no supo como expresarlo, saliendo de su boca lo primero que se le ocurrió "esto es un error"

Pero en que carajos estaba pensando en decirle eso Raven, si antes me odiaba ahora ni siquiera va a querer saber de mí. Definitivamente soy un imbécil.

Mientras Dick se recriminaba las idioteces que había dicho, Raven había hecho explotar cada mueble en su habitación; se sentía tan molesta y la vez triste. Richard Grayson le había vuelto a romper el corazón.

Enamorándome de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora