as long as you're with me 🏳️‍🌈💫 {bruno x pol}

tres.

*PDV: BRUNO*

Aun seguía sin creerme lo que había pasado.

Estaba en un estado de shock constante. Realmente no asimilaba la situacion, tenía la sensación de que cuando todo esta tortura acabase y llegara a mi casa me iba a encontrar con mi padre, vivo, y sentado en el sillón marron de siempre escuchando algo de Kórsakov y leyendo a Descartes.

Pero que va.

No era así.

Y las cenizas que tenía justo en frente de mí lo demostraba.

Me sentía en otro planeta en ese momento... o bueno, mejor dicho en otra dimensión.

Era como si estuviera viendo la situación desde fuera, como si fuera una persona externa a todos y todo lo que estaba pasando. Como si fuese consciente de lo que estaba pasando, pero no fuese capaz de entender lo que significaba, de sentirlo.

Lloraba. Hombre, pues claro que lloraba, pero realmente, ¿para qué? ¿por qué? Eran cosas que no tenía claro en estos momentos. Mi cabeza era puro caos en esos momentos, y si lloraba era simplemente por la inercia de hacerlo, porque veía a todos los de mi alrededor llorando y era como "pues supongo que yo también debería llorar".

Sin embargo, sentía que el llanto era real.

Era una situación tan extraña que sinceramente me es imposible explicar con palabras.

Cuando todo acabó y salí de aquel lugar tan horrible junto a mi abuela y a Gina, al primero que vi, fue a Pol.

No lo podía evitar, a pesar de que sabía que no debía acercarme a él (ya que él estaba con mi mejor amiga), pero que puedo decir...
En esos momentos me daba igual.

Pol me volvió a acoger en sus brazos (como por 5° vez en el día de hoy) y empezó a susurrarme cosas que al tener la cabeza hecha un lio, no sabía del todo procesar, pero que tampoco hacía falta, ya sabía todo lo que me estaba diciendo, ya que Pol, cuando me susurraba, me hablaba tan cerca de la oreja, era como si me hablara directamente al cerebro. Como si no tuviera que hacer ningún esfuerzo, como si no tuviera siquiera que pasar por el aparato auditivo, porque ya sabía lo que quería decir.

A pesar de todas las otras personas que estaban ahí, yo solo veía a Pol.

No me separé de él hasta que noté una mano llamandome tocandome el hombro.

Con todo el dolor de mi corazón me separé de Pol y vi a Gina detrás mía.

-¿Qué pasa? -Traté de sonar tranquilo, después de frotarme los ojos para apartar las lagrimas.

-¿Nos vamos ya? -Me preguntó ella, acompañada de mi abuela, a quien tenía bien cogida del brazo.

En ese momento miré a Pol, como tratando de buscar en él una respuesta.

Y así fue, la encontré. Y esa respuesta fue exactamente lo que necesitaba escuchar.

-Puedo ir yo contigo... si no te importa claro. -Dijo timidamente.

Espera, ¿Pol tímido? ¿Y eso desde cuando?
Cuantas cosas habían cambiado...

-Por favor. -Repuse casi con desesperación, lo que hizo que Pol, y mis demas compañeros me miraran extrañados.

Pol miró a mi abuela y a Gina como para buscar la aceptación a su propuesta.
Cuando estas asintieron con la cabeza, Pol sonrió.

-Perfecto entonces. Vamos.

Mi abuela y Gina comenzaron a dirigirse hacia el coche, pero yo les hice una señal con la mano para que se esperaran, ya que quería despedirme de mis compañeros.