CAPÍTULO 4: MI NUEVA CASA, MI NUEVA VIDA

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NARRA CLAIRE:

-¿Lista?- Preguntó Samie mientras acomodaba bien la maleta en el suelo.

-Eso creo...- Me miro por última vez en el espejo después de cepillarme el pelo. Me siento cansada ya que ayer apenas pegué ojo pensando en todo esto. Estoy muy nerviosa por lo que podría pasar a partir de ahora.-Necesito despedirme de mi cuarto...- Ella simplemente me sonríe y asiente tomando en sus manos mis dos maletas y desapareciendo por la puerta.

Me siento en el borde de mi cama, contemplando el cuarto donde he vivido todos estos años, toda mi vida. Sin ánimos, contemplo las paredes violetas recordando aquel día en el que Samie, Jason y yo, nos pusimos a pintarlas mientras bailábamos y cantábamos con la música que salia de mi pequeña radio, a todo volumen, sonrío ante ese pensamiento, me levanto y paso por mi escritorio... Cuanto tiempo pasé aquí sentada de madrugada estudiando como loca, observo el resto de mi cuarto hasta llegar a mi cama, sitio donde pasaba la mayor parte de mi tiempo: Escuchando música, leyendo revistas, oyendo los pequeños sonidos que emitían los pájaros que se apoyaban en mi ventana y, sobre todo, llorando pensando en mis cosas, en las ilusiones que siempre quise pero nunca llegué a ser, nadie me dejó y nunca me atreví a contárselo a Samie, supondría que ella tampoco me dejaría.

Un pitido de una auto me sacó de mis pensamientos, me acerco a la ventana y veo a dos personas salir de ese auto que probablemente sería el que hubiera pitado, sé que esas dos personas son Leslie y Mark, que vienen a buscarme. Decido bajar pero, antes de salir por la puerta, hecho un último vistazo atrás, despidiéndome de mi cuarto.

Bajé las escaleras y, al final de ellas, se encontraban las dos personas que supuse quienes eran, junto con Samie, estaban charlando sobre algo, se les veía muy felices y sonrientes, una vez me observaron, sonrieron aún más.

-Buenos días Claire ¿Que tal dormiste?- Saluda Leslie dándome un abrazo.

-Bien.

-Un poco nerviosa ¿Cierto?- Esta vez le tocó el turno a Mark, lo abracé.

-Sí... Bueno... Mucho..

-Es normal, bueno, ¡Vámonos!- Cogen mis maletas y salimos del edificio. Llegando al auto, Mark abre el maletero y guarda dentro mis maletas, luego decido despedirme de Samie.

-Pórtate bien pequeña, te hecharemos todos de menos- Noto como se le derraman lágrimas por sus mejillas.

-Prometo visitaros continuamente- Digo mientras me aferro a ella. No lo puedo evitar y dejo que mis lágrimas salgan a flor de piel, son muchos años los que pasé con ella, me ha criado, me ha cuidado, me ha mimado y ahora la dejo aquíi, yéndome con dos personas desconocidas a mi ''nuevo hogar''. Me separo de ella y noto un beso suyo sobre mi frente.

-Estaremos aquí esperándote con alegría- Sonríe sin ganas.

Sonrío abriendo la puerta trasera del auto, Mark y  Leslie se están despidiendo de Samie agradeciéndole lo que ha hecho por mí. Estoy dispuesta a entrar, pero un grito hace que pare en seco, haciéndome retroceder.

-¡¡Claire!!- Vuelvo a escuchar ese grito y unos pasos rápidos, como si alguien estuviera corriendo, de repente, noto que alguien me abraza fuertemente, yo, sorprendida, dejo que se separe para ver quien es esa persona, me doy la vuelta y veo...

-¡Jason!- Grito abrazándolo con fuerzas. Mi mejor amigo estaba aquí. ¡Me había olvidado de él!

-Nosotros te esperamos en el coche- Agrega Leslie apoyando una de sus manos en mi hombro, asiento sonriente y vuelvo mi vista a Jason.

-Quería despedirmey, de paso, darte esto, no tuve tiempo de envolverlo- Me enseña una pequeña caja, me la entrega y rápidamente la abro. Un colgante de oro aparece dentro de la caja, lo observo detenidamente, veo que tiene forma de corazón y, en él, unas letras inscritas, lo cogo y leo las letras ''J & C''. Le miro sonriente con más lágrimas en los ojos, nos abrazamos, sabría que esta sería la última vez que nos despediriamos, estoy muy emocionada pero a la vez, muy triste, porque a partir de ahora lo veré muy pocas veces.

-Muchas gracias Jason, eres el mejor amigo que he tenido, y tendré, te quiero- Beso su mejilla dejando luego, nuestro último abrazo.

-Y yo a tí hermosa- Besa mi cabeza, dejando que me acurruque en su pecho- Y yo a tí..  Visítame cuando quieras, estaré aquí, esperándote siempre.

-¡Hecho!- Grito entrando en el  coche.

-¿Preparada Claire?- Pregunta Mark mirándome desde el retrovisor.

-Preparada- Les sonrío por primera vez alegre, puedo notar su felicidad y la de Leslie, veo que están muy unidos conmigo en la adopción, es como si volviera a nacer, por primera vez tendré unos padres.

Mark arranca y, mientras el coche anda, veo como el orfanato donde he vivido toda mi vida, va desapareciendo, junto con dos personas a las que les entregué mi corazón.

Es hora de dejar el pasado y caminar sobre mi futuro con mi nueva familia.

Ahora me tocará conocer mi nueva casa, pues ésta será mi nueva vida...

SIEMPRE EN MI MENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora