She isn't just another one, Harry. » styles. {actualizaciones lentas}

4.

Capítulo 4: La fiesta de Darren Winter y un lunes de locos.

Hailey:

—¡Jus! —chillé. <<Quiero saber que tal la cita>> No, claro que no conciencia. Sólo quiero que te quedes callada, y ya. 

—¿Qué, Hai?

—¿Cómo te fue con mis tips? —pregunté. ¡Hey! Me debería dedicar a esto, ¿verdad?

—Genial, linda —sonrió—. ¡Fue mí mejor cita después de años...! —suspiró pesadamente. Oh, no. Había recordado a Sarah.

—Oye, cambiemos de tema. ¿Adivina quién consiguió entradas para la fiesta de Darren Winter?

—¿Tú? ¿Grace?

—¡GRACE! —chillé emocionada. Iriamos a una fiesta, después de meses sin que nadie organizara nada.  Justin comenzó a gritar conmigo. 

—¡PARTY HARD! —mascullamos, comenzando a saltar y bailar.

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—Joder —mascullé sobando mis sienes. Odiaba esta materia. ¿Adivinen qué? ¡Estaba con Harry! Mejor no puedes ser Matemática, pensé con irónia

Un rato después sonó el timbre, haciendomé correr hacia afuera junto con la fauna de alumnos. ¡Sí! ¡Al fin suena el timbre!, pensé sonriendo. Caminé hacia Grace quién se encontraba frente a su casillero. 

—Hoy iremos a la fiesta —masculló. 

—Lo sé. 

Luego de unas cuántas sonrisas por mi parte, y bailes por parte de Grace, nos encaminamos a la cafetería. 

Pedimos nuestro almuerzo, y para no tener problemas (ya que el idiota de Harry estaba allí), me alejé. 

Comimos rápidamente, y luego nos retiramos a nuestros respectivos salones. Espero que sean las ocho, pensé. A esa hora empezaba la fiesta.

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—¡Ese es el vestido! —festejó Grace. Llevaba un vestido negro, que se ajustaba perfectamente a mi cuerpo y resaltaba mis atributos—. Te maquillaré —agregó tomando su bolso lleno de maquillaje—, estás... lista —murmuró, girando la silla. Sombra de ojos oscura cubría mis párpados y mis labios tenían el color rojo pasión. Algo de rubor en mis mejillas, rímel... todo perfecto. 

—Amiga —chillé—, me dejaste hermosa —la felicité, abrazandola. Bajamos las escaleras, esperando a Ethan y Justin en la sala de estar. Mi amiga estaba lista hacia horas, y yo... sólo lo dejé para el final.

El timbre sonó, dejando ver a Justin y Ethan. Los dos chicos nos guiarón al auto, para emprender el viaje. Luego de una hora, –demasiado aburrida, por cierto– llegamos a la casa de Darren Winter. 

Al entrar, todos estaban bailando al compás de la música, que inundaba todo el salón. Justin se alejó con Grace, y ésta le dio un vaso. Oh, Justin... no lo bebas. Demasiado tarde. Jámas, pero JÁMAS debes confiar en las bebidas que te da Grace. La última vez que la acepté, terminé cantando el karaoke cantando con una cabra. Sí, eso paso de verdad.

—Eres hermosa—susurró una voz en mi oído. Qué no sea Harry, pensé. <<Sí, es Harry>> Gracias conciencia, simpre necesito tú opinión.

—Y tú, un idiota —susurré con una sonrisa, mientras lo pateaba. Qué bueno que era esto.

—Gracias, linda —murmuró él, retorciendosé de dolor.