1 Corregido

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Los rayos del sol fue lo que la despertó, estiró sus brazos para darle un abrazo. Se sentía blanco y suave, pero sus desilusiones comenzaron cuando vio que no había nadie.

¿Habrá sido todo un sueño? No, no podría serlo, lo notó al sentir un pequeño dolor en su entrepierna.

-Natsume, dónde estás.

 Se puso un albornoz, y fue a buscarlo por la casa.
Bajó a la primera planta y escucho la cocina encendida, sonrió al saber que su amado estaba al otro lado, pero de inmediato se puso seria al ver quién era. 

-Ruka.

-Buenos días- puso todo en un plato y se lo dio.

Dio un bocado y dijo. 

-Ayer por la noche...

¿Será que con el que estuvo ayer fue él? ¿Su mejor amigo? Sus ojos empezaron a cristalizarse, pero él habló. Pero se veía tan real, sus ojos, su boca, su tacto.

-Ah, sobre anoche pues.. - suspiro- perdón Mikan, nos llamaron para una misión.. no quise levantarte porque estabas tan cansada, fui y ya arregle todo lo que teníamos que hacer así que no hay problema. 

  Suspiré. Así que no era él.

-¿Pasó algo ayer en la noche?

Mikan se tensó, sus manos empezaron a sudar. No era buena mintiéndole a su mejor amigo. 

-No, no pasó nada.

Terminó de comer, lavó el plato y se dirigió a su cuarto. 

No sabía a donde se había ido Natsume así que iba a investigar. Se detuvo al frente de su ventana vio un árbol donde quizá se pudo haber subido, fue al baño pero estaba todo ordenado, revisó debajo de la cama y nada, vio en su estante de perfumes pero tampoco. Ya no había más lugares, se sentó en la cama con las manos en la cara.

Natsume por favor no me hagas esto.

Se dirigió otra vez al baño, se duchó, se cambió y preparó sus armas.
Salió del baño y se hecho un rato en su cama recordando la gran noche que tuvo ayer con el Natsume, pero seguía igual de preocupada y molesta por dejarla sola.

 Abrazó su almohada, tenía su aroma. No lo había visto en años y saber que no está le rompía el corazón. Levantó la mirada al lado de la almohada y había una nota. La agarró rápidamente, pero tocaron la puerta, la metió debajo de la almohada.

-Ruka ¿Qué pasó?

-Ah, perdón, ¿es mal momento?

Tragó. 

-No, dime que pasa. 

-Nos llama Persona, tenemos una misión. Encontraron a Natsume.  

-Ahora bajo, prepara todo.

Ruka asintió y salió.

Se levanto y abrió la nota que hace un momento había escondido. Pero solo había una palabra.

Nos vemos después, no te preocupes no me volveré alejar de ti.

Quemó la nota con uno de sus Alices, bajó rápidamente donde Ruka.

- Vámonos. No perdamos tiempo.

No dudo en seguirla, a pesar de que esta tal vez sea su única oportunidad de decirle lo que siente. Prefirió guardar silencio.

Deseo [Gakuen Alice]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora