Naruto y Naruko los hermanos de la esperanza

Cap 07: Misión

esta historia no me pertenece

Naruto pertenece a Masashi Kishimoto.

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07: Misión

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Esto no era lo que Naruto y Naruko habían tenido en sus planes, querían ser fuertes y lo eran, habían demostrado a sus padres que no necesitaban de su entrenamiento para ser fuertes y acababan de demostrarlo, siendo ahora Chūnnin y estando a poco de ser Jōnnin, pero fue más rápido de lo que ellos querían. Demasiado rápido, quizás estuvieran llamando la atención de sus padres y quizás Minato pronto supiera que ellos no eran completamente fieles a Konoha, eso sería un problema y necesitaban tener una salvaguarda, necesitaban enviar la información que habían descubierto sobre el consejo, al Damiyō de forma inmediata. En estos momentos, estaban en el campo de entrenamiento, encerrados en un coliseo creado por Kakashi, luchando con Taijutsu, pero recubriendo sus manos con Chakra elemental. Naruto tenía Taiton recubriendo sus manos y Naruko tenía Suiton.

Naruko esquivó un puño de Naruto y le lanzó una patada que tiró al rubio al suelo, para luego saltarle encima y tomarlo de las muñecas― "Niisan, ¿Cuándo enviaremos la información?" ―susurró ella, Naruto giró su cadera quedando él, sobre ella.

― "Hoy mismo, apenas finalicemos este entrenamiento" ―dijo Naruto ―Te ves muy linda, cuando te sonrojas ―ella estaba sonrojada, por el lugar en el cual Naruto se encontraba sentado en ese momento. El rubio se puso de pie.

―Muy bien ―dijo Kakashi apareciendo ―Ahora, vamos a realizar una misión, pero antes les enseñaré a cómo hacer más poderosas sus Jian. Por favor: desenfúndenlas ―Ambos rubios obedecieron a su Sensei, mostrando sus armas ―Ahora: Naruko, concentra Suiton en tu mano e intenta sentir tu arma, como una extensión de tu cuerpo ―la rubia asintió e intentó hacer lo que le decían ―Naruto, concentra Taiton en tu boca y sopla sobre la hoja de la Jian ―el rubio obedeció a su Sensei, obteniendo un filo revestido de Taiton al instante.

―Lo logré ―dijo Naruko, mostrando su arma.

―Bien. A esto se le llama: filo de Chakra elemental, ahora: enfréntense ―ordenó Kakashi, ambos hermanos se lanzaron contra el otro a gran velocidad, chocando sus armas ―Perfecto. Bien: terminamos por hoy.

― ¿Eso es todo? ―gruñeron los rubios, solo para ver como su Sensei se desvanecía en un Shunshin de hojas, los hermanos sonrieron.

Naruko sacó un pergamino― ¡Fūinjutsu: Oto no Kekkei! (Jutsu de Sellado: Barrera de Sonido) ―la rubia envió Chakra al pergamino y un domo verde se formó.

― ¡Kuchiyose no Jutsu! ―exclamó Naruto y una leona apareció, una leona normal, rubia/castaña.

― ¿En qué puedo servirle, Naruto-Sama? ―preguntó la leona.

―Hola Hikari-Chan, necesito que lleves este pergamino, con el concilio del fuego, en... ―la invocación lo interrumpió.

―Con el consejo feudal de Hi no Kuni ―dijo Hikari, tomando el pergamino en su hocico y teniendo cuidado de no humedecerlo con su saliva, para luego desaparecer.

―Naruto, Naruko ―dijo Kakashi, haciendo que los hermanos detuvieran su andar ―Me alegro de que aun estén aquí: Hokage-Sama, me mandó a llamar al equipo Kakashi, porque el equipo 7 tiene problemas, vayan por sus cosas: ropa, armas y comida. Nos veremos en la salida sur de la aldea ―los Chūnnin asintieron y desaparecieron para ir por sus cosas.