They called themselves celebrities

Friends

Una fresca brisa entró por la ventana de mi habitación e hizo que abriera los ojos. Me incorporé en busca de mi móvil y cuando lo alcancé aún sentada en mi cama me puse a revisar todos mis mensajes.

*Dinosaur squad*

Olaya: hey chicas ¿nos vemos hoy?

Erika: tengo ganas de morirme, pero me parece una buena idea.

Aina: buenos dias! vale, me parece bien.

Erika: ¿ a qué hora?

Olaya: a las cinco os espero donde siempre.

Finalmente me levanté de la cama aún algo dormida. Miré el reloj. Eran las once de la mañana y tenía muchas cosas que hacer así que me metí en la ducha. Una vez dentro mientras me enjabonaba mi largo pelo rubio pensaba en todas las cosas que tenía que hacer hoy: primero tenía que recoger mi habitación, más tarde tenía que ir al trabajo de mi madre a llevarle una cosa y después había quedado con mis amigas.

Salí de la ducha y me vestí. Hacía mucha calor ya que estábamos a finales de junio así que me puse unos shorts y una camiseta con mis convers. Me recogí el pelo con dos trenzas ya que al tenerlo tan largo me desprendía mucha calor y no quería morir.

Cuando terminé de prepararme, recogí el baño y empecé a recoger mi habitación sin antes poner mi cd de one direction en el ordenador para así recoger algo más motivada.

Después de aproximadamente una hora mi habitación ya estaba limpia así que cogí la bolsa que mi madre me había pedido y salí de casa. Al llegar a su trabajo vi como estaba muy ocupada así que decidí dejar la bolsa en el mostrador e irme sin molestar pero mi madre me vió y se acercó a saludarme.

-Hola mami -dije.

-Hola cariño ¿ya te ibas? -preguntó.

-Sí -respondí- te vi atareada y no quería molestar.

-Ah no te preocupes, para saludarte siempre tengo tiempo -dijo sonriendo.

-Bueno ya me voy, tengo cosas que hacer -dije dándole un beso en la mejilla.

-Vale cariño, ten cuidado -respondió- ¿te acordaste de imprimir eso?

-Mierda -dije- se me olvidó. Bueno esta tarde he quedado con las chicas, lo imprimiré con ellas, no te preocupes.

Volví a mi casa para comer mientras con el portátil preparaba mi currículum. Necesitaba empezar a buscar trabajo ya.

Un poco antes de las cinco, me puse los zapatos de nuevo y salí de casa en busca del bus que me llevaría a casa de Olaya.

Finalmente llegué a su casa y piqué al timbre.

-Pasa está abierto! -gritó una voz desde adentro.

Entré y me encontré con su madre.

-Hola Aina ¿todo bien? -preguntó.

-Sí todo bien ¿usted? -respondí.

-Genial, gracias por preguntar, ya sabes donde estan -dijo.

-Sí gracias, hasta luego -dije.

Salí al jardín y abrí la puerta del cobertizo.

-Helloo -dije.

-Llegas tarde -respondió Erika.

-Ha sido culpa del bus -respondí.

-Ya claro -dijo Erika.

-Deja de quejarte y hazme un hueco -dije señalando el sofá.

Me senté en el sofá y empezamos a ponernos al día. Hacía una semana que habiamos acabado las clases y estuvimos hablando sobre como nos habian ido las notas y sobre qué teniamos pensado hacer este verano.