LIBERTAD

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Salió del hospital con rapidez y una seriedad que rivalizaba con el rictus de uncadáver. Solo llevaba consigo su teléfono y sus zapatillas en el cuello, ellas hansido sus más fieles compañeras a lo largo de su vida. Cruzo un par de calles hastala parada del autobús, una vez ahí se decidió a esperar con suma paciencia aeste. En su mente se agolpaban una gran cantidad de imágenes y sentimientosque no la dejaban tranquila. 

  Ella había pasado por mucho a lo largo de su corta vida, y le había tocado serfuerte por ella y su madre desde que su padre murió. Durante esa etapa dolorosade su vida había aprendido lo efímera que es la vida y lo fácil que las cosascambian; esa experiencia la había hecho madurar de golpe, sacrificando su tiernainfancia y su más grande pasión para ayudar a su madre a estabilizarse. Fue supadre quien le compró sus primeras zapatillas y la llevó a sus primeras clases, fueél quien descubrió ese gran potencial y quien le dio el apoyo suficiente para poderconfiar en sí misma y luchar destacar de entre todas en su clase. Esos recuerdosle provocaron una punzada de dolor en el alma tan fuerte que casi creyó quetendría un infarto de la tristeza que la agobiaba. 

Un fuerte ruido la sacó de la cámara de tortura mental que era su mente en esosmomentos, era el autobús que por fin había llegado, subió a él y después de haberpagado el pasaje se dirigió los asientos del fondo. Mientras el autobús seguía surecorrido normal ella contemplaba la ciudad que se abría entre las calles atestadasy callejones obscuros; contemplaba con tristeza y fascinación cada rincón de laciudad que la vio crecer y todos los lugares en los que alguna vez fue feliz. 

Vio el viejo cine de la ciudad donde vio sus primeras películas de terror, y elcallejón a su lado donde fumaba a escondidas con sus amigos. Luego pasó por latienda de discos en la que trabajo una gran cantidad de veranos pasando díasenteros dedicada solo a escuchar música, también ahí conoció a su primer novio ysu primer gran decepción amorosa. Recordaba muy bien que la engañó con unade sus amigas, irónicamente le hizo un favor al dejarla porque al poco tiempo su"amiga" acabó embarazada. 

Pronto las vibraciones del autobús la llevaron a un sueño profundo del que nosintió su llegada. Soñó con el día en el que le arrebataron su oportunidad de serdescubierta y destacar como su padre había creído. Ella había luchado pordestacar y lo estaba empezando a lograr, en contra de todo lo que esperabanquienes la conocían había sido admitida en un conservatorio de ballet muyprestigioso. Había empezado a ser reconocida como una chica con gran potenciala pesar de venir de un origen tan humilde, puesto que todos sus compañeros eran de familias acomodadas o de gran influencia, y a pesar de la gran diferencia declases llegó a conocer a grandes personas que se convirtieron después enexcelentes amigos. Pronto le llegó la oportunidad que había esperado desde suinfancia, un reconocido director de una de las más prestigiosas compañías deballet había llegado a la ciudad a realizar un pequeño certamen para elegir aprospectos para su compañía.

Por fin llegado el gran día; había estado días enteros practicando, perfeccionandosus habilidades y trabajando sin descanso para poder ser descubierta y cumplirsus sueños; pero otra vez la vida le jugó una mala broma, haciéndole creer que eltalento y las buenas intenciones lo eran todo. A pesar de haber sido una de lasmejores, si no es que la mejor, al no tener apoyo más que el de sí misma laignoraron por completo. El día que le dieron esa noticia su mundo se vino abajo,todo por lo que había trabajado le pareció solo tiempo perdido; una vez más tuvoque abandonar sus ilusiones y esperanzas para regresar a la cruel realidad.  

Abandonó el ballet desde ese entonces y decidió que la vida no la volvería a hacercaer otra vez. Se cerró al mundo por completo, se dedicó a un trabajo mediocrecon una paga apenas suficiente para vivir. Se había resignado por completo a laidea de solo sobrevivir hasta que se topó con Harry. El entro a su vida un fríoinvierno hace un par de años y de la forma más extraña posible.  

De odio,  amor y otros viciosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora