Mi amor eterno:
¡Que difícil es escribir estas notas!, cuando mis ojos se inundan de lágrimas del corazón que se agolpan y acumulan asfixiando mi garganta; son sentimientos encontrados que se bifurcan en la esperanza de volver a tus brazos, aun sabiendas que no te tengo cerca ya de mi persona, pero no lejana de mi corazón distante de mi mente, porque en ambas permanecerás por siempre, se perfectamente que es muy complicado volver a verte y estar cerca de ti; tu decisión es palabra hecha oro que tengo que respetar al pie de la letra, pero a la vez ¡no te miento!, que muero de ganas de no cumplirla, me angustia el no verte y no saber de ti, añoro tenerte junto a mi lado, solo me quedo con los recuerdos que brotan como caudales de agua cristalina del manantial más puro y sincero de mi amor por ti. ¿Sabes? ¡Sigo soñando! todo fue maravilloso en los momentos de entrega total, algo paso que se nos fue el momento mágico de sentir nuestros corazones palpitar y de percibir nuestras respiraciones cual rocío del amanecer en nuestros oídos.
El día de tu firme y decidido adios, de tu labios oir decir que "Nada es para siempre", pero he de contradecirte sólo en esta ocasión para expresarte que de mi amor hacia ti nada cambió, si no todo lo contrario, se incrementó cual lava del volcán las activo a punto de hacer erupción, se que es difícil qué lo entiendas, pero para mi es una actitud de vida que llevaré por siempre anhelando encontrarte algún día, sino es en esta vida, en las que me pudiera tocar volver a verte, y ahí, en esa ocasión, luchar para nunca más perderte.
En espera de ese tan anhelado sueño, te deseo toda la suerte y éxito del mundo.
Atentamente
Tu eterno y fiel amor por siempre.
Adiós amor... Adiós mi amor eterno.
