capítulo 1

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Maldita sociedad, maldita soledad, maldito dolor... en este mundo ya no tengo en quien confiar... nunca lo tuve, el amor para mi nunca existió y no existe, no tengo amigos por el simple hecho de ser yo, no se si estoy viva o muerta... no me importa ya, mientras que para otros el mundo es de color rosa, para mi es gris y negro. Para mi el amor es un asco, varias veces trataron de verme la cara de tonta, pero al final terminaron llorando, se podría decir que soy más fría que el hielo, no me importa si te hago sentir mal, si agarro tu corazón y lo destrozo, siempre seré de pocas palabras y muy directa, la verdad es que la gente normal me parece estúpida, esta es mi forma de ver el mundo, ¿Quién soy? Mi nombre es Aiko, ¿En quién me convertí? En tu peor pesadilla, ¿Por qué? Pronto lo descubrirás.
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(suena el despertador)

Aiko se levanta medio adormilada y desactiva la alarma.

-Otro maldito día en esa escuela -pensó Aiko para después soltar un pesado suspiro.

(Narra Aiko)

Abrí el armario, busqué ropa y una toalla para después dirigirme al baño, luego de terminar de bañarme me vestí con una camisa blanca, un pantalón negro y unos botines, esta vez dejaría mi cabello suelto.

Tomé mi mochila y salí de mi casa directo al instituto. Estoy en segundo año de universidad, tan solo falta un año para graduarme y comenzar a dedicarle tiempo completo a mi trabajo.

Después de 15 minutos caminando llegué al instituto. Justo cuando iba caminando por el pasillo de los casilleros noté que al frente venían unas tres chicas; sí, eran esas mismas chicas mas "populares y temidas de la escuela", no les tomé importancia y seguí caminando con mi mochila colgada de uno de mis hombros. Las tipas pasaron por ambos lados de mí cuando una de ellas; la más morena para ser exáctos, chocó su hombro con el mío haciendo que casi cayera mi mochila.

-¡Fíjate idiota! -le grité.

La chica morena de nombre Reiss se detuvo y volteó a verme seguida de las otras dos.

-¿Cómo me llamaste? -cuestionó Reiss.

-¡Idiota! ¿así o más claro? -respondí comenzando a irritarme.

Reiss sonrió en forma de burla y se acercó lentamente hacía mi. Los demás estudiantes solo nos miraban sorprendidos y en silencio, puesto a que nadie se atrevía a retarlas ya que si lo hacían les iba mal.

Antes de que Reiss estuviera a punto de abofetearme, la chica rubia de nombre Akane quien era la "líder" la detuvo con unas palabras.

-Déjala Reiss, no vale la pena -dijo mirándome de pies a cabeza con una expresión de asco.

Yo solo mire a las dos chicas de manera muy fría e indiferente.

- Tienes agallas Aiko -habló Akane-, eres la primera que se atreve a insultar a una de nosotras de esa manera.

-Entonces, ¿Qué debería hacer? -comencé a hablar-, ¿dejar que unas idiotas hagan lo que se les pegué la gana?, me importa un carajo si hacen lo que quieren con los demás, pero que se metan conmigo ya es diferente, yo no voy a dejarme pisotear por personas como ustedes -No podía dejar de mirarlas con desprecio.

-Tranquilízate un poco, Aiko -respondió acercándose a mí y tomando mi mentón-. ¿Te das cuenta de que tú también nos estás insultando?

Yo moví mi cara de manera brusca para soltarme y lo único que hice fue escupirle en el suelo para después caminar hacia mi salón.

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Holii personitas, como ven esta es una historia nueva, espero que les haya gustado musho uwu


Gritos De Una Oscuridad  [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora