Alma Corrompida parte 2 : Frágil

Parte 2: Fragil

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Jace tomo uno de aquellos planos con creciente molestia

─explícame nuevamente─ exclamo estupefacto el ojidorado

─ya te lo dije chico ángel nuestro objetivo es el preator lupus─ murmuro más dormido que despierto el ojinegro mientras daba vueltas a su café con una cuchara, pero nadie podía culparlo si después de todo llevaban casi dos días preparando el ataque que se llevaría a cabo al día siguiente.

─eso ya lo se, lo que no entiendo es porque yo tengo que acompañarte, eso sería arruinar todo─

─mira rubio teñido─ hablo el hijo de lilith apuntando al rubio con la cuchara

─soy rubio natural idiota─ exclamo el ojidorado mientras tomaba el café que hasta hace poco estaba preparando el ojinegro quien lo miro con odio puro

─es cierto eres un idiota, pero la única razón por la que quiero que estés en el ataque de mañana, es porque también estará tu amado parabatai y ya que ha sido tan complaciente te dejare estar con él durante el ataque─

Tras escuchar las palabras de Sebastián el rubio no pudo hacer nada mas que escupir el café que termino mojando al hijo de lilith quien tomo una servilleta para secarse el rostro , jace no lo podía creer ya que saber tal cosa lo había sorprendido por una parte deseaba volver a ver a alec y saber como estaba y por otro tenia miedo de saber la reacción del ojiazul ya que aun recordaba perfectamente como se había comportado con su parabatai quien solo tuvo que enfrentarse a todo un ejercito , el rubio cerro los ojos sabiendo que se arrepentiría de sus palabras

─no─

El ojinegro miro estupefacto al rubio

─se puede saber porque no quieres ver a tu parabatai─

Jace miro hacia otro lado mientras susurraba

─ no tengo derecho de verlo, no después de como lo trate─

Sebastián miro al abatido joven y negó mientras le arrebataba la tasa de su café que hasta hace unos momentos él había preparado

─ Jace Herondale acaso mi padre te educo para ser un completo cobarde, que yo recuerde el desgraciado de Valentine te enseño muchas cosas, pero la cobardía nunca fue una de ellas así que déjate de estupideces y no seas cobarde enfrenta a Alexander que dudo mucho que el tonto te odie ─

─y tu quien te crees para decir que fue lo que el imbécil de Valentine me enseño─

─aunque te duela ambos fuimos criados por el mismo hombre y por lo tanto recibimos la misma educación o una parecida así que déjate de lloriqueos y vete que me espantas el sueño y recuerda mañana nos reuniremos en el punto acordado─

El rubio lo miro ofendido mientras tomaba su chaqueta del respaldo de la silla

─a mi no me engañas desde que retomaste esta guerra que habías parado por casi un mes has estado actuando raro, me recuerdas a mi cuando conocí a tu hermana y la verdad eso me da miedo─

Exclamo con un falso escalofrió el rubio

─solo lárgate Herondale antes de que decida matarte─

─no podrías matar a tu estratega─ tras aquellas palabras el rubio salió de aquel departamento perdiéndose por las calles de Londres

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