〖 My Fool Sunshine✨ 〗

🌸― Capitulo 2

El peli-marrón abrió poco a poco sus ojos, ya despierto miró a su reloj electrónico.

― 12:45 PM...― murmuró neutral, recordaba que se desveló con una película de horror que se topo en su búsqueda.

Suspirando se levantó de su cama y se fuera a duchar, de paso arreglaría su cuarto, no quiere regaños de su madre para este fin de semana, quiere descansar de todo eso.

[. . .]

Bajaba de las escalaras en dirección a la cocina, ningún rastro de vida por aqui, justamente localizó otra nota en el refrigerador.

Me entere que tenemos vecinos nuevos, me gustaria que les entregues el pastel de calabaza que compre esta mañana, donde cuando llegue y lo vea aun en el refri, ya sabrás que nada bueno vendrá. Es una orden. No te lo comas.

PD: Por favor, usa tus gafas.

Rodó los ojos para tirar la nota lejos, detestaba que lo usaba para sus mandados con su estúpida excusa de trabajar hasta tarde, simplemente se aprovecha de eso, todo el puto tiempo. Prefirió desayunar primero para hacer antes de ir de mensajero, no promete ser amable o al menos dara el intento de serlo.

[. . .]

Veía la televisión con notorio aburrimiento, no habia nada bueno que le gustara por desgracia, y asi estaba por 3 horas, solo una pelicula de misterio le llamó la atención, lastimosamente ya iba para la mitad. Luego recordó hacer el condenado mandado, tambien que este dia su madre llegaba temprano, la última vez que no hizo algo asi, termino con una sandalia en la cara.

Soltó un bufido de molestia para tomar sus gafas negras, ir hacia el refrigerador, saco el pastel con cuidado, no tenia las ganas para comprar otro por este llega a tirarlo. Fastidiado se dirigió a la salida y cerrara de un patada su puerta a salir, ya de ahi fue en marcha a la casa de a lado. No habia notado de que esa era color menta, no se fijaba mucho en su alrededor, toco el timbre varias veces, ganas no le faltaban de dejar el pastel ahi y se largara. En eso se abre la puerta, revelando a una chica; una pelinegra de longitud hasta los hombros, ojos lima, aparentaba ser de unos 25 años, a diferencia del chico raro de ayer, usaba pintas de formales como si fuera al trabajo, era muy poco llamativa.

― ¿En que le puedo ayudar? ― cuestionó cortésmente la mujer con un acento muy raro.

― Ah, si, soy el vecino de a lado, mi madre me dijo que le entregará este pastel de su parte, como bienvenida al vecindario ― dijó sin expresión y le entregara el pastel.

― ¡Oh, que bello gesto! ― tomo el pastel encantada.― Puedes pasar si gustas, podremos darte algo de pastel.

― No gracias, tengo tareas que hacer
― se excusó para irse de vuelta a casa, dejando a la vecina con palabras en la boca.

[. . .]

Llegando a casa, subió a su habitación, quizas podria leer una de sus libros favoritos de temáticas se misterio y horror. Para cuando este apenas ingreso y se acercaba a su escritorio para leer pacíficamente su libro de ayer. Ese era pasatiempo favorito cuando estaba a solas, era su distracción, lo único que no mandaría a la mierda, lo que lo tranquilizaba, estas historias con tramas asi eran su pan de cada dia, su espacio "feliz".
Quiere estar asi para siempre.