- Aclaremos esto Agreste, no es una cita - mencionaba Marinette - Iremos juntos a esa fiesta, reiremos un poco y bailaremos un rato luego de eso cada uno se va a su casa.
- Las cosas que te suceden por ser una mal postor - decía entre risillas Adrien - Si hablamos de condiciones, tienes prohibido enamorarte de mí y reclamarme si una chica me busca, no estaremos en una cita.
- Tienes un trato - ambos estrechando las manos.
- Se me olvidaba, cuanto lo siento - sonríe con malicia - es una fiesta de disfraces, de conejita te verías muy bien.
- No sucedera.
- Debía intentarlo.
Ambos seguieron conversando, disfrutando de sua batidos y riendo de cosas cotidianas hasta que se hizo de noche y cada quien siguió su camino, por la mente de Marinette se movieron los pensamientos de como vestir para la fiesta de disfraces, que disfraz sería único y aparte de eso muy bonito, debía ser algo apropiado pues seria la primera vez que saldría con un super modelo.
Paso varios días pensando su disfraz, debía esoger sabiamente el atuendo idal, durante algunos días sus busquedas de internet (luego de sus adelantos con la universidas) fueron de disfraces.
- Alya voy a volverme loca, no sé que usaré y en serio debo lucir super bien.
- Algo que combine con el atuendo de Adrien sería lo apropiado.
- Lo pensé pero sería algo tan trillado y la fiesta seguro será de gente famosa, no quiero hacer el ridículo.
- Amiga, ambas sabemos que uno de tus talentos es hacer el ridículo.
- Me duele tu honestidad.
- No me culpes porque sea honesta.
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Un sueño por realizar
Teen FictionEra el primer día del verano. Ese día saliendo de la universidad, una joven estudiante de cabello azabache la sorprendió una lluvia inesperada, en la parada de autobús un chico aguardaba con los audífonos puestos y pensando en cosas irrelevantes de...
