Besos dulces y amargos (Bakugou x Kirishima x Kaminari)

Color rojo

(Narra Bakugou)

Deberían darme un premio por soportar a ese parasito en mi habitación, ya no lo tolero mas incluso casi llego a tirarlo de las escaleras pero no cometi esa idiotez porque seguro mi madre me rompería algún hueso como castigo, además ya casi no falta nada para que inicien las clases.

Estar sin Kirishima era muy solitario ciertamente, estar sin su compañía era algo intolerable para mi pero ni siquiera podía ir a verlo porque aun no esta de regreso en su casa. Cuando nos separamos en las vacaciones el tio de Kirishima se lo llevo a su casa para pasar los últimos días a su lado, alegando que quizá no lo vería ese año. Tampoco sabia donde estaba y era frustrante no saber el numero de la casa de ese sujeto para al menos poder hablar con el por teléfono, pero en su lugar tengo que esperar hasta que den inicio las clases.

-Maldito calor...- murmure por lo bajo totalmente aburrido.

Y para cerrar con broche de oro mis vacaciones el retrasado mental que vivía en mi casa estaría en mi misma escuela, en la misma clase que yo, no solo tendría que verle la cara en mi casa si no todo en maldito dia en la escuela. Mi madre si que no conoce lo que es el peligro, ella no estaría para defenderlo eso era lo único que me alentaba un poco, si no podía molestarlo tanto aquí. Cuando inicien las clases volveré la vida de Denki en un infierno.

-Volveré tu vida un infierno tenlo por seguro – le digo mientras me acomodaba en mi cama para tomar una siesta mientras el leía una historieta.

-C-Como quieras -soltó asustado, no podía hacerle nada ahora ya que mi madre estaba afuera limpiando el pasillo, ella me escucha atentamente cuando estoy con este tonto.

El peor verano diría ya que después de ser separado del lado de mi amigo, el restos de los días eran similares uno al otro. Creo que hasta me aburre ya golpear al idiota, pero igual lo hare sin importar que sienta, ver su cara me molestaba mucho y saber que estaremos juntos en la escuela me hacia envenenar la sangre, reconozco algo que me irrita sobre todo lo demás y es el hecho de pensar una pequeña posibilidad en que Kirishima le llegue a agradar Denki, pero claro que eso no ocurria no le permitiré a ese intruso acercarse a nosotros.

-¿Qué demonios es este pútrido presentimiento?- me pregunto de nuevo en el cuarto. Observe por el rabillo del ojo al idiota y seguía dormido, últimamente no eh logrado dormir bien estos días.

Pasando unas dos semanas mas el dia que espere había llegado. Inicio mal ya que no encontraba a Kirishima por ningún lado durante la formación de primer año tampoco vi al idiota de Denki pero me valio tres diablos, buscaba a Kirishima con la mirada pero no lo encontré en ninguna parte de nuestra fila, estaba desesperado. Estaba a punto de rendirme con la posibilidad de verlo quizá se quedo dormido o no vendrá hoy al primer dia de clases, cuando estaba ya dentro del salón de clases escuche unas voces acercándose a la puerta reconoci una al instante.

-Eres un chico simpático Denki, me agradas – era la voz de... Kirishima

-Y tu muy interesante Kiri- no lo pudo terminar de hablar cuando apenas entro se cruzo con mi mirada, pude verlo temblar. Unos instantes después entro otro chico pero su color de cabello era ¿Rojo?

-Bakugou amigo, no sabes las cosas que me pasaron este dia – ese chico tenia la misma voz de Kirishima y se acerco a mi rápidamente, pero viéndolo bien de cerca si era el, se veía tan atractivo con ese cambio de aspecto,  que no podia decir nada -¡Bakugou...! Tierra llamando a Bakugou ¿te encuentras bien? Estas algo rojo- apenas sentí su mano en mi frente casi me desvanecí al notar lo cerca que estaba de mi rostro, ver de cerca sus ojos me hipnotizaron.

-S-Si... ¡Si, maldita sea! – le grite apartando su mano al notar la cara de asombro en el imbécil de Denki, quien nos estaba observando.

-Me alegro mucho – dijo para abalanzarme a mi capturándome entre sus brazos- ¡Amigo, te extrañe mucho! Este verano fue tan distinto sin tu compañía luego de que nos separaran, ojala hubieras venido conmigo a casa de mi tio Fatgum, vieras lo fuerte y divertido que es. pero ahora esta con un brazo enyesado – me conto en rápidamente para soltarme.

-¿Brazo enyesado? -pregunte confundido.

-Mi madre cuando vino a buscarme para volver a casa, al ver que mi tío me tiño el cabello de rojo le dio una paliza y le quebró el brazo izquierdo- dijo para poner su dedo índice en mi frente- Escúchame si sigues frunciendo el entrecejo te saldrán arrugas – soltó una gran sonrisa para prácticamente arrastrar al idiota que estaba plantado en la puerta para traerlo con nosotros – Por cierto es el Denki fue mi acolchado humano cuando trepe por las plantas y salte el muro de la escuela- al verlos bien ambos tenían algo de suciedad en sus ropas, pero esto ya no me estaba gustando.

-¿Por qué diablos trepaste el muro? -pregunte al borde de la máxima irritación.

-Bueno es que a mi madre se le quedo el auto sin gasolina a unas calles de aquí y vinimos corriendo hacia la puerta para intentar llegar pero ya estaba cerrada, y bueno mi madre no iba aceptar que no entrada me ayudo a treparme en el muro gracias a las plantas de esta, y cuando ya estaba en la cima vi un monton de hojas apitadas, me dijo que saltara y que le gritara si logre llegar intacto al suelo – se detuvo para poner sus manos detrás de su nuca- Y salte sin mirar nuevamente y escuche un quejido debajo de mi, al mirar me di cuenta que había caído sobre este niño en vez de caer en la pila de hojas, lo bueno fue que este si estaba en ella para amortiguar el golpe y bueno aquí estamos después de charlas y llegar a clases – finalizo para sujetar por el cuello al imbécil y tenerlo a su lado- Divertido inicio de clases ¿ verdad Denki? -le pregunto al otro.

-Dejate de esas estupideces y siéntate ya – le ordene antes que el otro siquiera respondiera, Kirishima me miro y asintió después sentarse detrás de mi, después de todo el maestro estaba a nada de llegar.

Esto no puede ser posible...

continuara...