Sinopsis completa adentro
¿Quieres saber qué paso con Hermione?
¿Qué paso con Draco?
¿Quién fue aquella persona que entre las sombras espiaba a nuestra pareja favorita?
¿Te quedaste con ganas de saber si Valentine se vuelve al lado del bien?
¿Hermio...
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Sueños.
Los sueños son algo que en estos tiempos ya casi no tengo, pocas son las veces en que Morfeo el dios de los sueños me visita, ya sea porque estoy tan físicamente cansado que prácticamente me desmayo en cuanto mi cabeza toca la almohada o por qué la poción para dormir sin sueños me ayuda.
Son pocas las veces en la que me permito soñar, pero, cuando lo hago los odio y alabó por igual.
Sueños que se ven repletos de imágenes tan claras como el cristal. Sueños donde veo unos risos castaños e indomables volar al viento. Sueños en los que una risa cantarina y clara se oye por todos lados. Sueños donde un par de ojos marrones me ven con el amor más grande que alguien aparte de mi madre me ha mostrado jamás. Sueños donde el contorno del cuerpo de una mujer brilla ante los rayos de la luna antes de proclamar que será mía para siempre.
Sueños de un pasado lejano.
Sueños que dejan llagas nuevas en mi corazón y causan más heridas en mi alma.
Sueños de una época donde fui feliz.
Sueños que me llenan de odio hacia mí mismo porque ella murió hace muchos años.
Sueños de hace 5 años.
—¿Joven Malfoy? ¡Joven Malfoy! ¿Está despierto? — La voz grave y cansada de uno de los elfos de la mansión me despierta de uno de estos sueños, llevo mis manos a mi cara tratando de despejar la última imagen de mi mente donde unos labios se unen con los míos en un beso que casi puedo saborear.
—Si Kreacher lo estoy ¿Qué necesitas? —Digo aún acostado y sin intenciones algunas de moverme.
—Lamento molestarlo tan temprano señor, pero el consejo ha solicitado su presencia en veinte minutos como mínimo señor —Prosigue la pobre criatura con un arrepentimiento claro.
Suspiro con cansancio al tiempo que me levanto con cuidado de la cama, mis músculos protestan por esto y un gemido de dolor seguido de una maldición, sale de mis labios ante la punzada que mi espalda alta siente. Anoche llegué de una misión cerca de la costa donde un par de Dementores siguen a un grupo de magos principiantes, por suerte los salvamos a todos, pero los golpes de la batalla se reflejan ahora en mi cuerpo
—¿Está bien joven amo? —Cuestiona la voz del elfo aun detrás de la puerta, me sorprende que aún no se haya ido, pero a la vez lo agradezco no creo poder vestirme solo.
—Si kreacher no te preocupes, pero te agradecería que volvieras en cinco minutos, no creo poder ponerme la camisa por cuenta propia —Explico con un tono de disculpas.
—Por supuesto joven amo lo dejo entonces para que se arregle, volveré pronto — Escucho los pasos presurosos del ser alejarse de mi alcoba, sus pasos son cortos y se oyen por mucho tiempo, al escucharlo alejarse de esta manera pienso en la situación actual;
