Conjunto de One-shots de un diabético y un pedorro

Mudo

Oh... Una pequeña hormiga caminaba en donde la nieve no era tan profunda...

Horaculo miraba la hormiga como si fuera lo más interesante del mundo, dejó lo que estaba haciendo y comenzó a seguir al pequeño insecto.

Mientras que los niños de cuarto grado; a excepción del TeamStan que estaba ausente, veían como Horaculo caminaba mirando el piso por el patio.

—Viejo, Horaculo es raro, muy raro—

—Si, pero el chico es muy bueno jugando...—

Conversaban sobre nuevo mientras comían sus loncheras.

—Soy... ¿Soy el único que se pregunta si es realmente mudo?—

Preguntó Clyde.

—T-T-Tal vez e-es sor... Sordo... So...—

Trataba de hablar Jimmy

—No, si fuera sordomudo haría señas, además de que él entiende todo lo que le decimos—

—¿De qué mierda están hablando ahora?—

Preguntó Cartman llegando con el resto del TeamStan.

—Sobre que Horaculo nunca le hemos escuchado decir ni "Pío"—

Varios miraron extrañados a Tucker por esa analogía ¿Por qué Horaculo tendría que piar? Pero Tweek siemplemente dijo "Cosas de peruanos"

—Horaculo si puede hablar—

Dijo con simpleza Kyle.

—¡¿Qué?!—

Todos los chicos expresaron su asombro con ese monosílabo en unisono.

—Una vez nos habló—

—Mientes, Marsh—

—Hmps hmps—

Se miraron entre ellos tras lo dicho por McCormick.

—Nos mandó al carajo... Pero habló—

Mientras el resto de los chicos llenaban de preguntas con respecto al tema al famoso cuarteto de South Park, un chico castaño ondulado se había quedado sin palabras.

¿Horaculo podía hablar? ¿Por qué nunca le dijo nada? Después de lo de los superhéroes se habían vuelto muy cercanos y pensar que nunca le dijo nada... Lo ponía algo triste.

Después de esa conversación los chicos se habían puesto un reto: "Lograr que Horaculo les diga algo"

Otro día había pasado y el chico de los millones de seguidores en sus redes sociales había entrado a su escuela para encontrarse que todos los alumnos lo estaban mirando.

—Horaculo ¿Qué hora es?—

Pregunto Donovan, a lo que el nuevo siemplemente le enseñó su reloj a Clyde, provocando que el castaño se frustrará un poco.

—N-No... Es que... No sé ver en esos relojes sin número ¿Me puedes decir la hora?—

Cuándo Clyde término la oración se encontró cara a cara con el teléfono móvil del otro chico con la hora en grande.

Después de enseñarle el móvil siguió caminando para encontrarse con Kevin y otro chico más con el que recuerda haber jugado pero no su nombre.

—Hey Horaculo ¿Es haya o haiga?—

Horaculo miro a ambos chicos y levantó para mostrarle un dedo levantando como queriendo decirles "La primera"

El siguiente día más personas se habían sumado más personas al intento de hacerlo hablar.

—¡Horaculo! ¿Qué es verde por fuera y blanco por dentro?—

Pregunto con una sonrisa Bebe, sonrisa que se borró cuando Horaculo sacó de su mochila una pera.

—¡Oye! ¡Estúpido de cuarto! Di algo antes de que matemos a golpes, marica!—

Pero antes de que los chicos de cuarto grado pudieran atraparlo para golpearlo pudieron escuchar una voz de fondo gritar "MICROAGRESIÓN" y después de un buen golpee en el estómago una nube de gas tóxico los rodeo, un pedo, y cayeron inconvenientes.

—¿Quién sabe la respuesta del ejercicio? El chico de adelante, dinos la respuesta—

Sí, hasta los maestros se habían sumado al reto, pero tampoco lograron mucho porque Horaculo se paró y desarrollo el ejercicio en la pizarra.

Kyle y Stan estaban caminando por el pasillo cuando fueron detenidos por unas manos que jalaron las mangas de sus abrigos.

—Oh, hola Horaculo ¿Qué sucede?—

"Eso es lo que quisiera saber" pensó el chico, miró a los super mejores amigos directo a los ojos un rato para luego con su cabeza señalar a unos compañeros que hablaban entre ellos mirando a Horaculo.

—Ah... Eso...—

Comprendió Stan.

—Estan compitiendo para ver quién de todos logra que hables—

"Así que era eso", agachó la cabeza en modo de agradecimiento y siguió su camino pensando en que hacer.

Tal vez podría simplemente esperar a alguna reunión en el gimnasio para hablar en público y saciar la curiosidad de sus compañeros, pero seguro luego se iban a pelear sobre quién lo escucho primero... Tampoco era tan molesto que le esten preguntando todo el día, era algo divertido de ver sus caras de frustraciones.

Al día siguiente al cerrar su casillero se topó con el rostro nervioso de Scott Malkinson, parpadeo y espero a que este le dijera algo.

—Hodaculo...—

—...—

—T-Tú... Tú y yo somos amigos... Vedad?—

El pedorro asintió la cabeza de forma afirmativa.

—Entonces... ¿Pod qué nunca me hablaste?—

¿Es en serio? ¿Hasta Scott se había unido a esa mierda? ¿Por qué tanto drama por escucharlo hablar? Frunció ligeramente.

—¡L-Lo siento! No... No sé porque no quiedes hablad... Y-Y si es algo por un problema un algo, en sedio lo siento... Solo... Me preocupa que hallas hablando con Stan, Kyle, Cartman y Kenny, antes de conmigo... Y-Ya sé que a ellos los conociste antes, pedo... Cómo nos hicimos cedcanos...—

Horaculo por una mano en el hombro del diabético y se acercó a su oído.

Scott comenzó a sudar, los chicos al rededor miraron la escena con gran curiosidad ¿Horaculo le iba a decir algo a Scott?

En un momento el chico de pocas palabras siguió su camino y se fue con una sonrisa en los labios dejando a todos los alumnos con gran curiosidad y a Scott hecho un manojo de nervios

—¡¿Qué te dijo?!—

Preguntó David a Scott queriendo saber cuáles fueron las primeras, sin contar lo que les dijo al TeamStan, palabras de Horaculo.

—M-Me...—

—¡¿ME QUÉ?!—

—¡Me lamió la oreja!—

Al día siguiente algunos se habían rendido con intentar hacer hablar a Horaculo, si no le dijo nada a Scott menos le iba a decir algo a otro compañero.

Scott estaba dirigiéndose a su clase cuando una mano se posa en su hombro.

—Perdon por la mierda de ayer, pero tú cara fue tan jodidamente graciosa—

Y tras decir eso seguío caminando.

Los alumnos dejaron de caminar al escuchar eso.

Horaculo había hablado.

Y para Scott fue la voz más hermosa que jamás había oído.

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Ví un comentario que decía que por estos one-shots los había comenzado a shippear y que necesitaba más... Bueno! Quién soy yo para negarle eso!

Esta Unikornia se despide.