Tu partida

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Se preocupan mucho por mi ya Se que es un año perdió pero no puedo aguantar ha esos profesores,  me aburren mucho siempre quieren estar ahí queriendo saber todo lo que uno hace. Me duele ver a mi madre así llorando por mi,  por que dice que estoy desperdiciando mi vida y mi juventud que tengo que aprovechar las oportunidades de estudio que tengo. En cambio mi padre solo espera el momento para reprocharme que voy otro año perdido que no sirvo para nada,  que tengo un problema y que lo único que me gusta es hacer sufrir a mi madre.  El no sabe que mi único problema es el  que me siento como una extraña en mi casa y en el mundo ya que nadie me entiende, nadie sabe los difíciles momentos que tengo que pasar todos los días con tan solo pensar en el.  Lo extraño no puedo dejar de pensar en el,  en los momentos que pasamos juntos, en todas las tardes que salíamos a caminar o jugar  fútbol,  y en todas esas lindas sonrisas que teníamos los dos.  No lo puedo negar,  Maximiliano dejó un gran vacío en los corazones de todos pero yo siento que el me dejó sin corazón,  porque el se lo llevó con el. Ya han pasado 2 años de ese trágico accidente en el cual Maximiliano, mi hermano menor murió.  Mis padres no han podido asumir su partida, todos los sábados van al cementerio a obsequiar le flores y a  llorar le,  por el contrario yo voy sola todos los domingos a mediados de las 4: 30 pm, siempre le llevó una Rosa 🌹 después me siento justo al lado de el y le cuento como me fue el día al terminar le reclamo el porque se fue así sin avisar sin darme el beso de despedida que siempre me daba. Mis padres creen que soy una chica de 17 años a la que no le importa la vida ni nada ni nadie que no sea yo y mi rebeldía. Un lunes mis padres después de recibir la noticia de que había perdido el año se sintieron muy decepcionados de mi, mi padre Manuel pensó que si me mandaba a una correccional de España con mi tía Rocío podía mejorar mi comportamiento y mis calificaciones del Colegio pero mi madre no quería que me fuera para España ya que estaría demaciado alejada de ella. Después de días de discusiones con mis padres por la razón de no quererme ir para España con mi tía Rocío llegaron a un acuerdo,  decidieron mandarme para un campamento en  New York.

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