Capitulo 38

150 16 0
                                    

Reborn: -sonríe levemente- Cuando será el "te amo"? -dice juguetón-

Tsuna: -se sonroja y sonríe-

Hayato: -entra rápidamente en la casa- Décimo! No vas a creer lo que hemos visto!

Yamamoto: -mareado al ser arrastrado por Hayato-

Tsuna: -se sienta en el mueble- Qué es?

Hayato: -se para frente de Reborn y Tsuna- Pues verás, estaba con Yamamoto de compras y de repente...

Yamamoto: Vimos a Hibari con ese cabeza de césped -masajea sus ojos por el mareo-

Hayato: Exacto y desaparecieron mágicamente!

Tsuna: -da una risita- No creo que fue mágicamente

Yamamoto: -da una risita- Yo le digo lo mismo

Hayato: Pero como es posible que desaparezcan sin rastro alguno?

Reborn: -alza una ceja- «Verde invitando a alguien en uno de sus escondites aun sabiendo que es un riesgo para él? Eso es muy raro»

Tsuna: -da una risita-

Hayato: -hace puchero- Arg mo~

Yamamoto: -saca una fresa de la bolsa y la pone en la boca de Hayato- Tranquilo

Hayato: -se come la fresa- Eres demasiado gentil, friki

Yamamoto: -se ríe- La gentileza se recuerda más que el mismo odio -guiña un ojo-

Hayato: -mira hacia otro lado- «Idiota»

Tsuna: «Que lindos» Ne, Yamamoto trajiste lo que pedí?

Yamamoto: Sip -le da la bolsa-

Tsuna: Gracias, hoy haré pastel de limón -toma la bolsa y va a la cocina-

Hayato: «Mm, no me gusta el limón pero no estará mal probar» -sonríe-

Yamamoto: cruza sus piernas y se asoma un poco- Te gustaría ayudar a Tsuna?

Hayato: -lo mira de reojo y sonríe- Vale -se levanta y va a la cocina- Décimo, déjeme ayudarle

Tsuna: -se voltea y sonríe- Claro

Yamamoto: -sonríe muy feliz y mira a Reborn- Son tan lindos, verdad?

Reborn: -sonríe levemente- Como te va con el entrenamiento?

Yamamoto: Soportable?

Colonello: Hai, donde estas parado hay minas. Si pisas una estas muerto -saca un cigarro-

Yamamoto: -sonríe nervioso- Eh? Minas?

Colonello: Sip -toma una piedra, la lanza causando que se active la mina y explota- Vez? No bromeo

Yamamoto: -suda frío-

Colonello: Cuando pases el campo de minas vamos a practicar la velocidad, vale? -sonríe y se sienta en un árbol- Avanza que también las minas tienen límite de tiempo

Yamamoto: «Límite de tiempo? !?»

Reborn: «Me imagino que usa métodos de guerra en este mocoso»

Yamamoto: «Doy gracias en que no estoy muerto»

Yamamoto: -cae al suelo respirando agitado-

Colonello: -mira su reloj y sonríe- 15 minutos, nada mal para un principiante

Yamamoto: -le baja una gota por la nuca- «Principiante?!»

𝐌𝐞𝐦𝐨𝐫𝐢𝐚𝐬 𝐝𝐞 𝐮𝐧 𝐌𝐞𝐣𝐨𝐫 𝐀𝐦𝐢𝐠𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora