Capitulo 87

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Hayato: -movía su pierna frenéticamente mirando a la nada mientras mordía su pulgar intentando disipar su nerviosismo-

Yamamoto: Hayato, te haces daño -toma la mano de Hayato alejándola de la boca y comienza en acariciarla-

Hayato: No estas preocupado? Qué pasa si Décimo no seria como antes después de lo que sucedió, o si...si -siente unos fuertes brazos abrazarlo-

Yamamoto: Tsuna estará bien -susurra en el oído y besa la frente-

Hayato: -tembloroso asiente y se oculta en el pecho de Yamamoto-

Ryohei: -silencioso entra a la cocina dejando a la pareja, abre el refrigerador. Buscando una jarra de agua hasta encontrarla y da unos grandes tragos en los vasos que se a servido- Uff, que rica agua -sigue tomando agua hasta terminar la jarra y sonríe gustoso- Siempre la mejor -llena la jarra de agua y vuelve a ponerla en el refrigerador. Se voltea encontrándose con Yamamoto, sonrojándose de la vergüenza- Lamento entrar sin permiso -rasca su cabeza-

Yamamoto: -da una risita- Qué dices? Mi casa es tu casa, te bebiste la jarra otra vez? -sonríe burlón-

Ryohei: No se puede evitar al hacer mucho ejercicio -sonríe avergonzado-

Yamamoto: -se acerca al refrigerador abriéndolo y saca una botella de agua. Comenzando a beber de ella-

Ryohei: -se recuesta un poco en la isla de la cocina mirando a Yamamoto- Sabes, tengo un presentimiento extraño

Yamamoto: Mm? -alza una ceja mientras deja de beber agua- Como cual?

Ryohei: No sé, demasiado extraño para mí -alza los hombros y acepta gustoso una botella de agua-

Yamamoto: No bebes agua cuando entrenas? -dice burlón-

Ryohei: Solo nos mojamos la lengua para hidratarnos cuando luchamos -da una risita y comienza a tomar la botella-

Yamamoto: En otras palabras, solo bebes agua después de luchar -sigue tomando agua-

Ryohei: -asiente mientras termina de tomar lo que quedaba- Exactamente

Yamamoto: -da una risita-

Ryohei: Qué cocinaras? Tengo hambre hermano -le sigue la risita-

Yamamoto: Vale hermanito -dice burlón-

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Ryota: -bosteza cansado entrando a una habitación- «Tengo sueño» -escucha la ducha causando que alzará una ceja curioso. Camina lentamente hacia la puerta del baño hasta poner su mano en la cerradura. Habré bruscamente la puerta y recibe un corte en la mejilla por un cuchillo volador- «Mierda»

Tsuyoshi: -chasquea la lengua- Eras tú, que diablos haces en mi habitación?

Ryota: Es tu habitación? -se gira viendo que era un poco diferente a la suya- Creo que por el cansancio me equivoque -susurra rascándose la cabeza-

Tsuyoshi: Podrías largarte? Necesito bañarme -entra a la ducha volviendo a bañarse-

Ryota: Claro -sonríe "inocente" viendo la silueta de su compañero quitarse la toalla que cubría la cintura hacia abajo-

Tsuyoshi: Hey, es afuera del baño -dice en tono de regaño-

Ryota: Vale, vale -levanta sus manos y sale del baño recostando su espalda en la pared-

Tsuyoshi: -suspira al ver que su amigo no se iba- Por qué reaccionaste así en la mesa contra Smoku?

Ryota: -sonríe triste- No es evidente? Me habla sobre una esposa que ya no existe. Una esposa que se marchó y jamás volvió

Tsuyoshi: -se limita a estar en silencio al escuchar el tono triste que extrañamente usa su amigo-

Ryota: -cruza sus piernas y deja sus manos en su espalda viendo el techo- Mi vida amorosa es un desastre, un amor traicionado y un amor no correspondido. Qué más puedo decir? Lo único que aviva mi corazón es el amor de mis hijos. Eso me mantiene vivo en este mundo -dice después de dar por terminada su pequeña declaración con un largo suspiro-

Tsuyoshi: -bufa de sí mismo al cerrar el grifo- «Entonces estamos iguales? Solo que mi esposa esta en la muerte» -se seca y se pone una ropa fresca para dormir en esa calurosa noche. Pero ve a su amigo tirado en la cama- No ibas a la tuya?

Ryota: -infla sus mejillas- No quiero estar solo~

Tsuyoshi: Vete a tu cama -intenta empujar a Ryota con la pierna pero solo logra quejarse- Hey! Suelta mi pierna!

Ryota: -hace un buen agarre en la pierna y lo jala a la cama-

Tsuyoshi: Hey! -ve que estaba debajo de Ryota y trata de empujarlo-

Ryota: Solo por una noche -susurra abrazándolo por la cintura mientras quedaba dormido-

Tsuyoshi: -se pone azul- No te duermas! -intenta despertarlo pero ve que ya estaba completamente dormido- Kuso -susurra- «Ahora la opción que me queda es dormir con él» -suspira y se acurruca en su esquina quedando poco a poco dormido-

Ryota: -al escuchar las relajadas respiraciones abre los ojos viendo la cara de Tsuyoshi- «Desearía tocar esos labios» -lágrimas en forma de cascadas aparecen de la nada- «Pero tengo satisfacción en ver molesto esa personita» -sonríe diabólico al sentir un aura oscura-

Smoku: «Tendré que planear tu muerte muy pronto, no crees?» -estruja sus manos en sus puños mirando desde la oscuridad-

Ryota: «Me encanta la venganza» -sonríe de oreja a oreja sintiendo que el aura era cada vez más fuerte. Causando que uno de sus colmillos apareciera encima de labio-

Smoku: «En verdad estas más muerto, prometo matarte lento pero muy seguro» -con pasos silenciosos pero apresurados sale del lugar con sangrientos pensamientos-

Iemitsu: Mi amor, qué sucede? -observa como su esposa recogía todas sus cosas metiendolas en las maletas apresuradamente- Mi amore

Nana: -detiene su andar y mira a su esposo- Tsuna...me necesita, ya llego su tiempo

Iemitsu: Hablas de ese tiempo mi amor? -dice sorprendido y preocupado-

Nana: Si...además siento que está pasando por un momento difícil -vuelve a retomar su deber guardando lo que le quedaba pero siente que toman sus manos-

Iemitsu: Ya entendí mi amore -sonríe levemente y une su frente con la de Nana- Descansa, mañana pediré un boleto a que vayas a Namimori, si? Ahora mantente tranquila, Tsuna esta en buenas manos

Nana: -aprieta sus labios y respira profundo calmando sus nervioso maternos-

Iemitsu: Tsuna esta con Reborn, Fon, Rei y todos sus guardianes, ellos siempre estarán de su lado cuando nosotros no, vale? -dice calmado mientras tomaba a Nana llevándola a la cama-

Nana: -asiente- Esta bien, me iré tan pronto tome el boleto

Iemitsu: Vale, ahora descansa -susurra besando las mejillas de su esposa-

𝐌𝐞𝐦𝐨𝐫𝐢𝐚𝐬 𝐝𝐞 𝐮𝐧 𝐌𝐞𝐣𝐨𝐫 𝐀𝐦𝐢𝐠𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora