Capítulo 8

52 2 0
                                    

Narra Ian.

Miró el reloj por tercera vez,y suspiró levantandome del sofá.

No va a venir,por supuesto que no lo va hacer.

Lleva 2 días sin venir, ¿Porque iba hacerlo hoy?

-¿Hoy tampoco viene Kendall?- Me pregunta Hannah y niego. -Vaya,la gripe la dio fuerte- Asiento con la mirada perdida.

Soy un completo gilipollas,el mayor gilipollas de todos Los Ángeles.

¡¿A quién se le ocurre besarla?!

Flashback.

¡¡La estoy besando!! ¡¿Pero que mierda hago!?

Al reaccionar me separo de ella,y la miró avergonzado.

Ella se queda inmóvil mirando al suelo.

¿Pero que acabo de hacer?

-Kend...Kendall yoo- Tartamudeo y ella se levanta. -No se porque he hecho esto- Admito.

No dice nada,y comienza a recoger todas sus cosas.

-Kendall,no te vayas así- Le pido.

-¿Que quieres Ian?- Espeta. -¿Tu también quieres reírte de mi?-

-¡¡Que!! ¡Por supuesto que no!- Alzo la voz sorprendido.-Esto no ha sido para reírme de ti,no se porque ha pasado-

Ella me mira decepcionada,y se marcha sin decir nada más.

Fin Flashback.

Esa mirada,esa maldita mirada me lleva atormentando desde el Lunes.

Hacia mucho que alguien no me miraba así. Ahora me vuelvo a sentir como aquel chaval de 20 años que decepcionó a su novia.

-Ian,¿Te vienes a dar una vuelta? Ya que Kendall no va a venir,podríamos pasar una tarde de hermanos- Me ofrece Hannah y asiento.

Si,me vendrá bien despejarme y dejar de pensar en lo sucedido.

A pesar de mis pocas expectativas, logró pasar una tarde genial, aunque el resto de la semana no lo es.

Kendall no ha venido en toda la semana a clase.

No he querido ir a buscarla,ni llamarla,para no enfadarla más.

No se que excusa le habrá puesto al señor Ross,o tal vez no le ha dicho que no viene.

Tengo tantas preguntas sin respuesta.

Salgo del baño de casa de Betty,y frunzo el ceño al ver que están preparando el comedor.

-¿Y esto? Nunca preparais así el comedor cuando vengo a cenar- Cuestiono.

-Es que van a venir los Ross a cenar, vamos ha celebrar que hemos cerrado un buen negocio- Me explica mi suegro y asiento.

No hay reglas para amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora