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Tome una ducha y puse me puse el mejor jabón con olor a frutas frescas que tenía.
Tome la toalla y me enrede en ella ,llegue a mi habitación y ya estaba en mi cama la ropa escogida ,pues ya la había elegido cuando llegue de la escuela.
Me puse un perfume de rosas y me puse unas botas cafés.

Baje y mi madre estaba dormida recargando su cara en su brazo arriba de las teclas de la laptop.
Suspiré y pase de ella.
Tome una manzana del frutero y me senté en el sofá, prendí el televisor pero todo era aburrido solo estába haciendo tiempo para que llegará mi padre y me dejara salir con más libertad sin que mi madre se preocupará,ella trabajaba mucho diseñando moda y bocetos se amanecía.
Aveces solo quería abrazarla y decirle que se tome un tiempo, que más que pasión en su trabajo la veo esclavizada.

Se escuchó un auto llegar.
Me pare y abrí la puerta recargandome en el marco de  esta y viendo a mi papá sacando su maletín y cerrando el auto.

.-tardaste un poco,quería salir y no quiero molestar a mamá-.hice una cara de reproche mirándolo.

-Hola cariño-.me palmeó la cabeza y entró.-la oficina estaba llena, había muchos trámites pero ya puedes estar tranquila-.

Siempre me encariñe más con mi padre,aunque trabajaba y no estaba en casa su figura paternal siempre estuvo conmigo en la infancia llenando de recuerdos a esta.
Además era más comprensible y calculador que mi madre, ella era nerviosa y sencible lo que hacía que se preocupará más,por lo tanto se pusiera esterica.

-dile a mamá que saldré al parque,comí el bistec con verduras que dejó en el microondas y ya me bañé-.dije sonriendo tomando mi mochila metiendo las llaves de la casa.

-esta bien no llegues tarde,sabes que confío en ti Avril-.dijo quitando su traje y encendiendo un cigarrillo mientras se dirigía a la cocina a despertar a mi madre.
Comenzaba a preocuparme por mi mamá ella estaba entrando en un estado de depresión.

Saque mis audífonos y caminaba tranquilamente sin prisa, notaba miradas de conductores que pasaban, casi siempre sucedía y bueno ya estaba acostumbrada, cuando tengo ganas me concentro y cruzo miradas con algunos que son apuestos, pero hoy no era el día.
Llegué al parque no era muy grande tenía una cancha que abarca el centro de este, unos columpios en la esquina abajo de un árbol frondoso con unas flores amarillas que caían y tapizaban el parque. Me gustaba.

Me senté en una de las bancas y miraba a la gente pasar, aveces solo me daba melancolía mi vida.

De repente una voz me saco de mis pensamientos.
-¿Estas sóla?-.escuche la voz viniendo de un auto rojo dejando ver a un hombre, este no era muy grande andaba en sus 30, con unos ojos color avellana y una sonrisa cálida.

-¿Por qué la pregunta?-.lo mire extrañada frunciendo el ceño.

-solo lo digo no es común ver a chicas aquí así-. -.haci como?-.interrumpí.

-bonitas-.este no dejaba de poner esa sonrisa.
-.como te llamas.-

-Avril.-dije con una sonrisa inocente pero escondiendo la intriga de la siguiente respuesta y adónde llevabaria este diálogo.

-bien es un lindo nombre-.miró hacia su muñeca viendo el reloj.- mi nombre es Jonh.
Me tengo que ir pero dime te volveré a ver?- dijo con un tono encalmado.

-tal vez, no lo se- dije con tono burlón -vengo cada viernes y ya me voy también,no puedo hablar con extraños-. Voltee hacia otro lado sacando de mi mochila mis lentes blancos y levantandome.

Sonrió de nuevo para sí mismo causándole gracia esto mencionado.-adiós...Avril.-subió el vidrio y se fue.

Caminé hacia la heladería y compre un cono de nieve.
Ya empezaba a obscurecer y mi padre empezaría a regañarme si llegaba tarde.
Avance con paso a prisa  hacia la puerta de salida mientras guardaba mis audífonos.
Los venía guardando cuando sentí un frío en mi pecho y empezaba esparcirse hacia abajo voltee hacia alfrente,vi a un hombre con camisa blanca, corbata roja y un pantalón de vestir negro.
Este me miró viendo mi helado comprado ya unos minutos en mi ropa embarrado, yo lo fulmine con la mirada con disgusto.

-lo siento mucho encerio-. Este trataba de hacer algo con las manos moviendolas en el aire como si tratarse de limpiar pero sabía que no había remedio.

-usted acaba de tirar mi helado-.dije volteando a ver cómo algunas personas que comian ahí y llegaban se quedaban viendo  por el problema y mi ropa.
Odiaba a la gente entrometida y mucho.
-ustedes qué ven-.dije poniendo los ojos en blanco y buscando en el mostrador una servilleta.

-encerio perdón, deja y compro otro helado para ti-.este se acercó al mostrador junto a mi y volteó a verme.

-bien,quiero uno de oreo por favor-. Lo mire y voltee mi mirada de nuevo hacia el mostrador.
El encargado abrió la caja donde están los sabores y empezó a rascar el sabor escogido.

Mire de nuevo al hombre con el que había chocado, era atractivo con una melena entre café y rojiza con unos ojos verdes claros, piel bronceada, unos brazos fuertes los cuales sostenían una billetera que esperaba para sacar el dinero para pagar mi helado.

-tome-. el encargado extendió el helado hacia el, pero este dirigió su mano hacia mí, en seña de que era para mi, dando el dinero a este.
Lo tome y lo mire .-gracias-. dije parada enfrente de el.

-no es nada es lo que pude hacer después de haber cometido tal pues accidente-.este se disculpaba nuevamente.-los celulares no son lo mío por eso no me fijé-.
Era muy muy atractivo.

-bueno gracias de nuevo y ten más cuidado con esas cosas, te harás adicto si los utilizas mucho-. dije con tono de burla.
Este río solamente.
Su sonrisa era linda.

-no hay problema, yo solo venía a trabajar verás me siento y solo habro mi laptop y pido un café.-

-encerio, te pareces a mi madre, pero necesitas cargar con tristeza y estrés-. Dije dando una lamida a mi helado con una sonrisa burlona.

-No se oye muy bien,deberías de estar al pendiente de ella.- dijo poniendo un tono de interés.

-Lose, pero mi padre y yo hacemos todo para que no caiga más-.

-bueno sino te importa me sentaré-este se sentó en la mesa que estaba alado poniendo su mochila en una silla .

-bien yo me voy, ya es tarde fue un gusto conocerte y si no te molesta e puedo preguntar tu nombre?.- pregunté levantando una ceja.

-si claro, es Loren-.dijo enmarcando esa sonrisa de antes que tanto empezaba a gustarme.
-y el tuyo?-.miro con esos ojos lindos, ala vez muy tranquilo y relajado, creo que su personalidad me estába agradando.

-Avril, un gusto-. dije haciendo un gesto cálido.
-y ya me voy, hasta luego Loren-.guiñe un ojo y salí de ahí.

Su expresión fue de desconcierto pero al final solo sonrió.

Estoy segura que nos veremos, después de todo esa ropa es de los secretarios donde trabaja mi padre de la planta baja.
Él tiene lo que yo quiero por ahora.

 (Dulce tentación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora