Olivia

Capítulo 14

A la mañana siguiente, Olivia se levanta algo mareada y con dolor de barriga. Mira el reloj. Son las 9:30. Recuerda que había quedado con Dean y mira su móvil rápidamente. Tiene bastantes mensajes suyos diciendo que se despierte. Pero el último es diferente.

No me gusta la impuntualidad. Pero por ti haré una excepción. Si hace falta te espero todo el día.

Olivia sonríe. Se conocieron gracias a su impuntualidad. Se levanta rápidamente a mirar por la ventana y cuando lo hace le dan unas terribles nauseas y va corriendo al baño. Una vez se encuentra mejor, baja al salón y corre las cortinas de la ventana que da a la puerta principal.

Allí esta. Va vestido con un jersey blanco y lleva los pantalones negros. Lleva el pelo perfectamente peinado, puede que haya utilizado incluso un secador. Tal y como le ha dicho, no se ha ido a pesar de que ya son casi las 10. Se dirige a abrir la puerta, pero pasa por un espejo y se da cuenta del mal aspecto que tiene. Así que corre de nuevo al baño para arreglarse un poco el pelo en un moño y lavarse la cara y rizarse las pestañas. La prisa le han provocado mas nauseas, pero esta vez consigue calmarlas sin vomitar. Se dirige a la puerta, pero prefiere asegurarse antes de que aun está ahí, asi que mira por la ventana de nuevo.

-¿Olivia?-dice Dean desde su coche.

No lo ha escuchado, pero ha podido leer sus labios. Está apoyado en su coche como cuando la recogió para ir a trabajar. Ella le saluda con la mano mientras él empieza a caminar hacia la puerta. Olivia da un gran suspiro y la abre. Entonces se da cuenta. No se ha lavado los dientes y ha vomitado varias veces. Sin pensarlo, cierra rápidamente la puerta cuando Dean está casi entrando y lo deja fuera. 

-¿Pero qué coño?-dice él sin poder creerse que le haya hecho eso.

Olivia lo escucha y se siente algo estúpida, se lava rápidamente los dientes y baja de nuevo a abrir la puerta, pero se encuentra una escena diferente a lo que había imaginado. Dean no la espera en la puerta, sino que está entrando al coche y está bastante enfadado.

Ella lo llama varias veces pero él la ignora. Entonces, sin pensarlo dos veces corre hacia él. Va en pijama y con un horrible moño, pero le da igual.

Dean esta arrancando el coche cuando escucha la puerta del copiloto cerrarse. Se da la vuelta y allí está Olivia. Está casi sin aliento y le produce una gran ternura su pijama de ovejas. No sabe por qué esta chica tiene este efecto en él, se ha metido en su cabeza y no parece que vaya a marcharse pronto.

-¿Se puede saber que haces?-dice Dean mirándola con seriedad.

-Entrar en tu coche. ¿No ibas a esperarme todo el día si hacia falta?-dice Olivia cruzando los brazos como si estuviera enfadada.

-Claro, pero si me cierran la puerta en las narices la verdad es que se me quitan las ganas. Y si encima me hacen esperar más de una hora...

Olivia se siente mal. Lo mira y pone la mano sobre la suya, que esta en el reposabrazos.

-Lo siento. Debería de haberte dejado entrar. 

-Eso pensaba, ¿se puede saber por que me has cerrado la puerta? 

-No me encontraba bien.

-¿Como ayer? Si no querías venir me lo podrías haber dicho anoche. Y si estabas con tu novio no quiero saber nada. Ayer no te dije nada, porque es tu vida, pero yo no quiero ser "el otro"  ni hacer las cosas a espaldas de nadie porque se lo que duele, si lo vas a dejar vale, pero si no olvidate de mi. 

Olivia se siente confundida, ¿el otro? ¿Quería eso decir que quería algo con ella?

-Se lo que estas pensando. Y no. Me he explicado mal. No quiero ser ni el otro ni el principal, simplemente alguien. Pero si sigues con él no seré nadie.

-Dean, creo que estas confundido. ¿Que te hace pensar que yo quiera algo mas? O incluso algo. No eres el centro del mundo.  Nos conocemos de dos días. Claro que voy a dejar a mi novio, pero no seas tan egocéntrico como para pensar que es por ti. -dice esto ultimo mas alto y algo enfadada viendo como cambia la cara de Dean-¿Creias que lo dejaba por ti, verdad?

Dean agacha la mirada. No se esperaba esta Olivia. Por mucho que le este diciendo cosas que no le gustan, le sigue produciendo una sensación que no había sentido desde hacia tiempo. Si fuera otra persona ya la hubiera echado del coche, nadie le hablaba así. Pero no quería irse, necesitaba estar mas tiempo con ella, aunque significara escuchar como le ponía verde.

-¡Dios mio, no puedo creer que pensaras eso!-dice Olivia con una risa de incredulidad.-Me marcho. No puedo seguir con esto.-dice abriendo la puerta del coche.

Entonces siente que alguien le coge del brazo y la sujeta para que no baje, Dean.

-¿Podemos empezar de nuevo? Siento haberte dicho eso, de verdad que quiero desayunar contigo.-dice mirándola a los ojos y acariciándole la pierna.

Olivia lo mira y piensa en su respuesta, le encantaría decirle que no y que se diera cuenta de que no es el centro del mundo, pero a quien quiere engañar, en el fondo sabe perfectamente lo que quiere hacer.

-Claro.-dice bajando del coche.

-¿Pero por qué bajas?-dice Dean confundido.

-¿Me has visto?-dice Olivia mirando lo que lleva puesto y señalando su pijama.

-Sí, estás preciosa, como cada día que te he visto.

-¡Dean! Voy en pijama.

Dean se rie.

-¿En serio? Pues debe de ser un pijama venido directo desde las mejores pasarelas de Paris, porque vas totalmente a la moda. Estaba a punto de preguntarte de donde era para comprarle uno a mi hermana.

Olivia se rie y espera que Dean baje del coche, pero no lo hace.

-¿Piensas bajar?- dice poniendo los brazos en jarras.

-¿De verdad?- pregunta él  aun desde el asiento del conductor bastante incrédulo.

-Claro, ni que te fuera a comer.

-Bueno...anoche no estaba tan seguro de ello.

Olivia se sonroja y le mete prisa para que baje. Piensa en qué pasaría si Ruben volviera antes de tiempo a casa y la viera con él. Sabe que no acabaría bien así que decide no pensarlo más.