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Dan se encontró con la imagen de Phil, durmiendo pacíficamente, cuando despertó.

Era verano y el ambiente lo anunciaba.

Se paró de la cama lo más silenciosamente que pudo para no despertar a su esposo.
Vaya, decirlo sonaba jodidamente bien. Hace un año que estaban casados y todo había ido de fábula.

Fue a la cocina para preparar el desayuno al compás de Blues Jeans, de Lana del Rey. Bailaba mientras picaba un poco de fruta.

Sintió unas manos alrededor de su cintura, sonrió.

— Buenos días —la voz adormilada de su pareja resonó en los oídos de Dan, quien sintió una corriente por todo su cuerpo. Se giró para verlo mejor.

— Hola, ¿cómo amaneciste?

— Perfectamente, ya que tengo al esposo más hermoso y perfecto a mi lado — sus labios se tocaron en un suave beso, mientras que los brazos y manos elegían su propio camino. Dan hizo un espacio.

— ¿No quieres desayunar?

— ¿Y si lo dejamos para después? — Phil sonrió en medio de un beso. Le gustaba jugar a ésto.

— Mm... No, primero desayunamos y después que pase lo que tenga que pasar — Dan se giró hacía la mesa para continuar con su tarea, y Phil salió de la cocina para poner la mesa.

Comían omelette de huevo, acompañado de frutas y café, mientras temas diversos se presentaban en la plática, pero uno en especial se hizo de total importancia.

— He pensado en agrandar más la familia — Dan hacia círculos en la mesa sin mirar a Phil.

— ¿Quieres adoptar un perro? — Phil arrugó el gesto.

— Sabes a que me refiero, Phil. Estoy hablando de un bebé — Phil dejó de comer la fruta de su tazón y miró a Dan, quién también hacía lo mismo.

— ¿Un bebé? Me parece perfecto — el pelinegro sonrió y siguió comiendo su fruta normal, lo cual sorprendió mucho a Dan.

— Pensé que costaría más convencerte — soltó una risita por lo bajo, contagiando a Phil.

— Sabes que lo hemos deseado desde que nos casamos, ¿cómo me iba a oponer?

— Uno nunca sabe — seguían mirándose entre sí, diciendo más que las palabras alcanzaban hacerlo.

Phil extendió su mano sobre la mesa, pidiendo la de Dan, quien éste se la dió, y con el pulgar la acariciaba dulcemente.

— ¿Y si intentamos desde ahora?

— No sé, me da pereza ir a la habitación.

— No tienes que caminar — Phil se levantó de la mesa y fue hacía Dan, tomándolo de las piernas y hombros. Lo cargo en modo princesa mientras se dirigían a la habitación besándose.

📅

Los resultados de los estudios ya estaban listos.
James les explicó que no pasaba nada raro ó malo con el bebé, sino que las contracciones son porque está creciendo algo más rápido de lo normal, pero no hay de qué preocuparse.

Dan replicaba que había conocido a gente que se había embarazado y no sufría así. James le seguía explicando que cada embarazo es único, que no se preocupara tanto.

Antes de salir del consultorio le dijo que viniera el próximo trimestre a verlo, para arreglar todo para el nacimiento del bebé.

The Cure «Phan» - (Próximamente tendrá portada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora