Shatter >K.T.H>K.S.J

Odio

Sus manos no dejaban de jugar entre ellas, su pierna no dejaba de moverse por el miedo y los nervios.

Ya llevaban 15 minutos en los cuales Miryo aun no salía del cuarto de SeokJin, necesitaba saber si su mayor estaba bien, quería saber si el podía ayudar en algo, necesitaba saber que estaba pasando.

—Tranquilo cariño, mira, contesta mis preguntas y listo, ¿De acuerdo? Quiero entender que esta pasando.

SeokJin asintió y se acomodo mejor en su cama, su pecho ya no dolía como antes pero su cabeza le daba vueltas,se sentía mareado.

—¿Tae te ha dicho algo malo?

SeokJin negó con la cabeza.

—¿Odias a TaeHyung?

SeokJin no dio respuesta por unos segundos pero termino negando.

No odiaba a TaeHyung.

—De acuerdo, dime lindo, ¿Por que rompiste todos tus espejos?

Miryo conocía la información de los espejos debido a YoonGi, pero ella necesitaba que fuera SeokJin quien lo dijera, si el no se lo decía entonces esa información no era útil.

—No me gusta el reflejo...odio verlos, odio las imágenes que muestras, lo odio, lo odio...odio verme en el..

La voz de SeokJin era como un susurro pero Miryo podía escucharlo a la perfección.

—¿Te sientes así por TaeHyung?

SeokJin asintió.

—Cuéntame todo, no odias a Tae, tampoco el te ha dicho nada malo, entonces dime el porque de tu dolor.

SeokJin comenzó a temblar, ya estaba cansado de llorar, pero no le había contado a nadie sobre como se sentía, solo YoonGi.

—Es que no entiendo...yo soy lindo, soy amable y soy talentoso, pero no logro entender porque el logro tan rápido lo que a mi me tomo meses y años, el logro conseguir lo que yo nunca pude ni podré...todos lo aman, pero no ami, yo soy talentoso y guapo también...—SeokJin elevo la mirada y miro con terror a Miryo.—Soy guapo y talentoso...¿Verdad?

Miryo sintió el corazón chiquito, le dolía ver a SeokJin así.

—Obviamente lo eres pequeño.

—SeokJin sonrió— Nunca me importo la opinión de nadie, podían gritarme feo y nunca me hubiera importada porque yo sabía que era guapo, sabía que yo era amable, lindo, talentoso y mi opinión era lo único que necesitaba, pero desde que llego TaeHyung...parece que mi opinión ya no es la importante, ya no puedo verme al espejo sin dejar de compararme, sin dejar de preguntarme ¿Por que?...Pero me molesta no poder odiar a TaeHyung...—Los ojos de SeokJin se llenaron de lagrimas.—No puedo odiarlo, lo he intentado pero no puedo, no tengo razones...me odio a mi mismo...—SeokJin tapo sus ojos con su brazo.—Soy tan patético...

Miryo miro hacía el techo y contuvo sus lagrimas, no podía permitirse llorar, debía dar una imagen fuerte ya que ella no podía dejar que sus sentimientos salieran a flote, ella estaba ahí para ayudar a SeokJin.

—¿Has escuchado el mito del chico de cristal Jinnie?

SeokJin hizo un sonido de afirmación.

—Cariño...no es algo falso ¿Sabes? Debes saber que tu...—Miryo coloco su mano en el pecho de SeokJin.—Tienes un corazón de cristal, se esta rompiendo Jin...y créeme que es doloroso que un pedazo de ese corazón se destroce por completo.

SeokJin no se sorprendió, había casos sobre eso pero no pensó que le ocurriría a el, que su corazón sería tan frágil como para romperse, un pequeño corazón de cristal.

—¿Y que sucede si dejo que se destruya?

—Es lo mismo que un corazón normal, no puedes vivir sin el..

—Pero yo ya estoy cansado, no estoy dispuesto a seguir...yo no puedo ayudarme, me cansé...

Miryo miro a SeokJin, se estaba desesperando, el caso de SeokJin era diferente y demasiado peligroso, incluso estaba dudando de su capacidad para ayudar a SeokJin.

—Haré lo posible para ayudarte...

TaeHyung se levanto del sillon de la sala cuando Miryo por fin había salido del cuarto de su mayor.

—¿Qué paso?

La mujer anoto un par de cosas en una pequeña libreta que tenía y observo a TaeHyung unos segundos, frunció el entrecejo y soltó un suspiro.

—Debes alejarte de el Tae.

—¿Q-qué? ¿Alejarme? Pero yo quiero ayudar, y-yo prometo que ayudaría a mi hyung...

—Lo se, lo se...solo hay que dejarlo tranquilo, escucha...se que no eres malo, que tus intenciones son tan inocentes y puras que incluso yo las agradezco.—La mujer abrió su libreta y leyó unas paginas.—Perdóname Tae, pero...no se como decírtelo, pero mientras más cerca estes de SeokJin, más daño haces.

TaeHyung no pudo reaccionar.

¿En serio solo lo estaba lastimando? El había tomado días  y noches pensando en como ayudar a SeokJin, en como sería cuando por fin se recuperara.

Pero su ayuda era todo lo contrario para SeokJin.

No pudo formular palabra alguna, no sabía que decir, la verdad no había nada que pudiera decir para arreglar la situación.

El quería hacer que su hyung sonriera, no que llorara por su culpa.

—P-pero yo he querido a-ayudar, no sabía que lo estaba lastimando y que-

—TaeHyung.

El menor guardo silencio y miro a Miryo.

—No es tu culpa, yo te explicare lo que ocurre después, ve a casa y descansa, ten esto.—Miryo le entrego una tarjeta a TaeHyung.—Llámame mañana para poder decirte lo que ocurre, pero ahora descansa.

—¿N-no puede decírmelo ahora?

Ella negó con la cabeza.

—No quiero abrumarte con tanta información, ademas, necesito saber que hacer con este caso...algo que pueda ayudar...

TaeHyung bajo la cabeza.

Ella podía ayudar, el no.