Al día siguiente desperté más temprano de lo normal, eran las cinco de la mañana y se veía por la ventana de la habitación como la luz se iba haciendo cada vez más notoria, estaba amaneciendo, siempre quise ver un amanecer, pero nunca pude hacerlo, solo escuché de ellos en los libros que solíamos leer mamá y yo. Pensé en levantarme e ir hasta la ventana para apreciar la salida del sol pero no quería que mis compañeras despertaran de mal humor a causa del ruido que pudiera hacer; cerré los ojos pero fue inútil, no necesitaba dormir más, me quedé en cama por una hora más hasta que alguna de ellas despertará para así levantarme yo. Ninguna despertaba, de pronto, el sonido del celular de alguna comenzó a invadir el silencio de la habitación. Escuché cómo Natalia y las otras se quejaban pidiendo que se apagara. Natalia dio un brinco desde su cama hasta el suelo para buscar ese ruido y detenerlo, hurgó entre las cosas y llegó a una de mis maletas, me incorpore en la cama para entender por qué buscaba entre mis pertenencias, abrió una bolsa de ella y saco mi celular, caminó hacia mí para entregarlo.
-¿¡Podrías hacerme el favor de apagarlo!? -dijo en tono molesto y recién levantado.
Lo tomé en mis manos, era mamá, colgué, más tarde la llamaría para pedirle que no me llamase a las seis de la mañana. Natalia volvió a su cama, pero la chica del otro extremo no volvió a dormirse, tomó su celular para ver la hora, le sorprendió bastante saber que eran las seis, quizá más bien, le sorprendió saber qué existe alguien a quien le llaman tan temprano. Siguió en su celular hasta que la otra chica despertó.
-¿¡Aaaggg, es en serio Camille!? ¿¿Tu celular sonando a las tres de la mañana??
-Camille...- pensé, pude saber su nombre sin ser interrumpida por alguna de las dos
-Ay, Samantha, yo siempre lo tengo en silencio. - le respondió molesta mostrándole su celular en silencio - Pregúntale a la chica nueva- ambas voltearon a verme.
-Lo siento, mi celular tiene una alarma programada a esta hora- les dije, Samantha solo giró los ojos y se fue de la habitación, Camille la vio salir y volvió a su celular.
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Homesick
Teen FictionMaría es una joven que padece una extraña enfermedad en su piel, la mayor parte de su vida se ha visto rodeada por las paredes de los hospitales. Al cumplir veinte años sus padres la inscriben a un campamento donde tendrá que enfrentar la vida real...
