The Diary That Tells Me About You

１•３

Una suave brisa entraba por la ventana haciendo danzar los risos castaños del muchacho que se encontraba sentado a su lado.

Instantes anteriores, el castaño se había presentado como Jeon Jungkook, tenía dieciocho años y cuán emocionado se hallaba por comenzar una nueva etapa en su vida.

Jimin no se sentía del todo cómodo con el muchacho al lado y para su infortunio, la clase de Historia parecía hacerse infinita a cada instante que el profesor abría su boca para comentar sobre el impacto de la música en la época de renacimiento.

Solo por hoy, repitió el más pequeño en su cabeza.

Y era así, puesto que su compañero de habitación había faltado por malestares estomacales.

Jimin podía sentir las penetrantes miradas de sus compañeros dirigidos hacia el nuevo alumno, y la del nombrado, sobre él.

Para desgracia del castaño, el rubio no se había atrevido a saludarlo o mirarlo desde que se sentó a su lado y con dificultad se percibía la silueta de su rostro a causa de su cabello.

Constantemente ocurría lo mismo a la hora de conocer a alguien fuera de su entorno; a la hora de entablar una conversación era el primero en huir o taparse los ojos con su cabello para evitar la mirada del interesado en conversar.
A Jimin siempre le había costado socializar, puesto por su discapacidad y timidez, fortaleciendo su miedo de ser excluido o burlado, cuyo era más grande que su deseo de tener amistades.
Él tenía a Seokjin y estaba más que conforme con su molesto compañero de habitación –y amigo–.

Al momento, el timbre sonó anunciando la hora del descanso.

El castaño consideró aprovechar estos instantes para entablar una conversación con su nuevo compañero de banco e intentar llevarse bien, pero, para su infortunio, el rubio parecía no tener el mínimo interés de socializar con él.

Por otro lado, Jimin no podia negar su entusiasmo por dejar la clase e irse directamente a su cuarto, la intensa mirada que le dirigía su compañero llegaba a ser incómoda en cierto punto.

Notó su intensión de hablarle, Jimin intentó excusarse.
Notó su intensión por acercarse a él, Jimin intentó alejarse.
Notó su intensión de ayudarle con sus libros, Jimin intentó negarse.

Se encontraban estáticos. Ambos.

Kim dió el primer paso.

Park retrocedió.

El castaño observo al rubio temblar y  ver sus ojos brillar con temor.
Para luego, verlo escapar.