Not exactly a Love Story

[E N D]

»Se ha acabado.«
Es la frase que corre por las calles, cuál reguero de tinta en una hoja en blanco...
La primera verdad que ha hecho que la humanidad, en siglos, se haya unido genuinamente por un bien común.
La vacuna que Farlan creó fue algo más que un rotundo éxito, fue un susurro débil, que creció hasta ser una esperanza en voz baja, y finalmente, logró convertirse en ese grito de júbilo que no ha dejado de salvar vidas.
Lo logró.
Logró hacer justo lo que mi organización buscaba destruir.
Nos convertimos, irónicamente, en eso que odiábamos: héroes.
O al menos, él lo fue.
Las personas lo miraban con respeto, le agradecían; todo el mundo, o lo que quedaba de él, sabía lo que MI científico había conseguido.
La cura para aquel terrible virus.
Esperanza en una jeringa.

Al caminar por las calles, mi único ojo no podía creer lo que veía: todos juntos, limpiando los escombros para intentar armar un nuevo hogar.
Los cuerpos fueron enterrados, los animales sobrevivientes criados, fueron cuidados, y nadie buscaba ponerse por encima de nadie.
Eso era algo que me costaba mucho aceptar, o creer.
Pero, como decía, ellos podían hacer y seguir haciendo lo que les diera en gana, Farlan era mío, y nadie me lo quitaría, nadie lo apartaría de mi...nunca más.

Nuestra mansión, una vez más, al pasar de los años de un nuevo inicio, volvió a ser el centro de aquel nuevo hogar.
Estábamos a salvo.
Las cosas no habían vuelto a ser como antes, habían mejorado, y así se mantendrían.
Ésta vez...nos encargaríamos de eso.
Sería diferente, pero estábamos juntos ahora y para siempre.
Hasta que mi corazón o el suyo dejara de latir.

—¿Estás bien?
—Lo estoy.— dice, mirando por la ventana. Hay llovizna, quizá se haga más fuerte al caer la noche.
Me siento a su lado, se acurruca en mí y siento su suave respirar, el latir de su corazón, contra mi pecho.
»Se ha acabado.«
—...Así que...lo logramos.
—Prefiero que te quedes con el crédito de eso, Farlan. Apenas te he ayudado.
—Oh, Hat, de no haber sido por ti no habría encontrado la cura.— me limito a sonreír. Tomó su rostro y coloco mis labios sobre los suyos.
Me gusta su sonrisa.
Es lo único que me mantiene cuerdo.
—Basta de eso. Se ha acabado.
—Y nada es más importante que eso.
—Precisamente.
—...valió la pena esperar.

>>Ve las señales, las luces brillantes que bajan por las calles de la ciudad. Escucha a la gente llamar...
Por la verdad, por la vida, por el amor enterrado tan profundo.
Eso nos une...
¡Tomaremos la ciudad, nuestras voces cantan! ¿Sientes el fuego en nuestros huesos?
Sé que nunca  seremos vencidos mientras el amor nos guíe.

La apatía me está matando, y no podemos seguir viviendo de rodillas...
Fuera de las ruinas la esperanza traerá un nuevo inicio, ¡sí quebramos el silencio!
Seremos la ciudad en un valle...
Fuimos creados para este momento, estamos destinados a estar aquí...
¡Y no nos detendremos hasta que los muros desaparezcan...!

...Somos una ciudad en El Valle...<<