You're mine. [Billdip]. #Premiosgravity2019

Capítulo 23

Dipper no podía creerlo... Lo había hecho...

...se había casado con Bill.

Ahora estaba en otro salón, con todos los invitados, sentado en una de las muchas mesas blancas redondas que había en el lugar.
Bill estaba sentado a su lado, sin soltarle la mano, jugando con el anillo de oro que indicaba que estaba casado, el cual, sinceramente, no se acordaba de haberse puesto en ningún momento, Bill tenía uno igual, un poco más grueso, pero con el mismo diseño.
El rubio no había dejado de sonreír ni un segundo desde que terminó la ceremonia, sin duda era el día más feliz de su vida, pero para Dipper, todo seguía siendo muy... Irreal.
No dejaba de pensar en el futuro... Tal vez no cambiaría mucho, es decir, ya había estado viviendo con Bill hace tiempo, prácticamente sería lo mismo, ¿no?

De pronto, Bill se puso de pie, haciendo sonar una copa para llamar la atención de los presentes.
-su atención, por favor- dijo el rubio- yo... Sólo quiero decir que éste es el día más feliz de mi vida, de verdad. He estado esperando este momento desde hace mucho, mucho tiempo, porque Dipper, desde el primer día en que te vi supe que quería pasar el resto de mi vida contigo... Todavía me acuerdo del día en que nos conocimos, en ése horrible colegio de Gravity Falls. Me acuerdo que tenía un par de amigos en común con tu hermana, a la cual de un día para otro se le ocurrió que haríamos linda pareja, y esa misma tarde nos presentó, tengo que admitir que se me hizo muy raro en ese entonces, porque ni siquiera era amigo de ella, pero de repente te vi, me sonreíste algo tímido, seguramente maldiciendo a tu hermana por dentro, pero sonriéndome de todas maneras. Eso fue todo. Caí por ti en ese mismo instante. Aunque al principio no quería admitirlo... Después de ese día no volvimos a hablar mucho, pero no podía evitar observarte, al entrar a un lugar, lo primero que hacía era revisar si estabas en él, y si lo estabas, te miraba de reojo cada dos segundos, lo cual era suficiente para mí... Hasta que un día, me enteré de que le gustabas a una chica de tu clase, la cual estaba reuniendo valor para invitarte a salir, no puedo explicarte cómo me sentí en ese momento, porque ni yo mismo sabía lo que sentía, sólo sabía una cosa: no quería que esa chica se te acercara.
Entonces decidí que debía actuar antes que ella... Aunque no salió como me lo imaginaba...  Me acuerdo lo mucho que me costó acercarme a ti, eras muy tímido, muy cerrado, muy inseguro... pero finalmente, después de lo que pareció una eternidad, terminaste hablando conmigo. Luego comencé a conversar contigo cada vez más seguido, descubriendo lo interesante que eras, realmente eras muy curioso... aún lo sigues siendo... Comenzaba a preferir tu compañía antes que la de todos los que hacía llamar mis amigos,  y también me di cuenta de que prefería estar charlando contigo todo un día antes que ir a la mejor fiesta del mundo (y Dios sabe lo mucho que gustan las fiestas...) y entonces lo supe: no me atraías, ni me gustabas... Estaba profundamente enamorado de ti. Y hasta el día de hoy eso no ha cambiado.
Me acuerdo que, el día en que aceptaste ser mi novio, pensé que era el mejor día de mi vida, pero me equivoqué... Es éste, éste es el mejor día que he tenido y que tendré en toda mi vida...
Puede que no sea la mejor persona del mundo... Puedo ser egoísta, inmaduro e impulsivo... Pero puedo asegurarte, Dipper, que por el resto de mi existencia, voy a amarte de la misma manera en la que lo hacía cuando éramos estudiantes... Y de la misma manera en la que lo hago ahora.

El castaño no pudo evitar dejar caer un par de lágrimas... En ése momento no estaba viendo al Rey Cipher, el que lo había secuestrado, lo había separado de su familia y había asesinado personas... Estaba viendo a Bill, su novio de hace algunos años, ése rubio tonto e infantil que siempre lograba sacarle una sonrisa, que siempre lo apoyaba en todo, lo defendía y se preocupaba por él... Veía al Bill Cipher del cual se había enamorado, el que se había robado su corazón.
Rápidamente, y sin pensarlo mucho, se puso de pie, y abrazó fuertemente al chico, como si no lo hubiera visto en mucho tiempo... Tal vez así era.
El rubio lo apretó entre sus brazos, sonriéndole cálidamente, aunque el menor no pudiese verlo.
Todos los invitados comenzaron a aplaudir, viendo la tierna escena.

Pero ninguno de los dos lo notó...

El castaño se separó un poco del chico, apoyando su frente en el pecho de éste, mirando el piso.
-no sabes por lo que pasé cuando te fuiste- susurró- lo que me dolió cuando me dejaste de lado, cuando decidiste que tus planos eran más importantes que yo... Más importantes que nosotros... Realmente no tienes ni la más mínima idea.

El rubio tomó el rostro del menor entre sus manos, obligándolo a mirarlo.
-Dipper, te juro que nunca más volveré a abandonarte, en verdad, te aseguro que no hay nada en este mundo que me importe más que tú. Tú eres mi vida, mi todo... Nunca voy a alejarme de tu lado.

Y por ése momento, el castaño, profundamente perdido en la mirada ámbar del rubio, sintió que debía confiar en él, sintió que quería quedarse junto él, sintió que todo volvería a la normalidad...
Sólo por ese momento.

Antes de que el menor pudiese decir cualquier cosa, el rubio se acercó rápidamente al chico, uniendo sus labios con los suyos, besándolo lentamente, para luego besar las pequeñas gotas de agua que habían descendido por las mejillas del amor de su vida.
-te amo, te amo, te amo- le dijo- te amo más que a cualquier cosa en éste mundo.
-yoo...- el castaño se alejó un poco del rubio, y por primera vez, se acordó de que habían más personas en la habitación... Y estaban todas con la mirada puesta en él -emmm...-dijo nervioso.
-no tienes que decirlo- susurró el mayor sonriéndole con cariño- quiero que me lo digas más adelante... Cuando realmente lo sientas.

Dipper, involuntariamente, sonrió de lado, agradecido del mayor, luego miró a todas las personas presentes, y de repente su mirada se cruzó con un cámara, inmediatamente dirigió su mirada al piso, con toda la cara teñida de un color rojo intenso y rápidamente se sentó, sin dejar de mirar hacia abajo.
Al ver esto, el rubio sonrió divertido y se sentó junto a su ahora esposo, tomándole la mano nuevamente. Y dirigiéndole una mirada maliciosa a la cámara sin que su Pino se diera cuenta.

Era una mirada que sólo un pequeño grupo de personas entendería.

¡Hooooola!, ¿cómo están?, ¿les gustó el capítulo?, espero que si jejeje.

Originalmente este capítulo iba a ser el capítulo del lemon, pero al final me puse cursi y terminé escribiendo esto, (ahora tengo que pensar en cómo pasar de esto al lemon jsjsjs).
No se preocupen, el lemon será en el próximo capítulo (alégrense, personas ansiosas de lemon) aunque no sé cuando lo voy a publicar, porque el tema del colegio va a estar un poco pesado esta semana, a esto sumándole que nunca he escrito lemon y temo hacerlo mal... Creo que el capítulo va a estar listo dentro de la semana :3 (no me odien).

Gracias a todas las maravillosas personitas que están leyendo esto, en especial a las que dejan sus hermosos comentarios, opinado de la historia, contando sus reacciones, o simplemente diciendo que les gusta la historia, mi amor eterno para toooooodas ustedes, maravillosas personitas <3.

Como siempre agradecería que votaran y en especial que comentaran, si te gustó el capítulo, ¡házmelo saber! 

Y bueno, creo que de mi este eso es todo...

¡Nos leemos luego!