Valentina POV.
No quiero separarme de Nathan, su respiración aun es pausada, por lo que deduzco que sigue dormido y no quiero despertarlo, aun es temprano. Tengo al rededor de media hora despierta, admirando su perfil; como se le hacen rulos en las puntas del cabello- que ya tiene un poco largo- su nariz pequeñas, aunque adecuada a su rostro, se infla un poco cada vez que inhala y su boca que esta un poco abierta, provocando leves ronquidos- que no escucho, gracias a que tengo el sueño pesado- todo él, me encanta.
Es increíble, me siento mucho mejor desde que le conté a Nathan la verdad- osea ayer- Además , dormí muy cómoda en sus brazos, es increíble la tranquilidad que siento cuando estoy con él; ojalá estos días nunca tuvieran fin, o por lo menos duraran más. Me gusta pasar tiempo con mi novio, sobretodo ahora que sabemos que falta menos de una semana para volver a los Angeles, a lo mejor, allá no podamos dormir juntos,- por lo menos hasta que sus padres se enteren, espero no nos pongan mucho lío-, pensar en eso me pone triste.
Es por eso que decidí disfrutar el tiempo con él al máximo.
-Buenos días preciosa- saluda con voz ronca, me da un beso en la nariz y me atrae mas hacia él.
-buenos días- susurro y me acurrucó mas en su pecho.
- Deberíamos hacer esto mas seguido- sonrió.
-Yo estoy dispuesta- digo y me levanto, muy a mi pesar.
-¿A donde crees que vas?- me toma del brazo- No te he dado permiso de salir de la cama- me susurra al oído y me hace caricias en el cuello con su nariz.
Río- no hagas eso, me haces cosquillas.
-Podría hacerte mas que cosquillas- me dice con voz seductora, le doy un beso rápido y salgo corriendo.
Lo se muy maduro de mi parte. Pero si no lo hago, probablemente ninguno de los dos se levantaría de la cama- no me molesta- pero hoy no podemos hacer eso. Llego a la cocina y me dispongo a hacer el desayuno, ya que, mi estómago me lo reclama. Siento unas manos rodear mi cintura, sonrió, este chico es perfecto.
Me hace dar la vuelta, aun entre sus brazos y me presiona en la isla de la cocina.
-Te dije que no te levantaras- me hace un puchero.
-Lo se- acaricio su mejilla- pero vine a hacer el desayuno- me vuelvo a voltear, para poder terminar el desayuno.
-Yo tenia en mente otro tipo de desayuno- empieza a dejar besos por todo mi cuello.
-Después de este desayuno- le aseguro, me toma de la cintura y sigue con los besos en mi cuello.
Dejo que lo haga, de todos modos es de mi agrado. Terminó de hacer el desayuno y lo sirvo, comemos entre risas y luego Nathan se encarga de lavar los platos. Me hago la que no sabe nada y camino hasta la habitación, necesito darme una ducha antes de salir.
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¡Esto Es Un Juego!
Teen FictionMuy pocas personas me conocen en verdad, soy como soy por que la vida y las decepciones me hay hecho así; la vida me enseño a ser fuerte y las decepciones a no confiar en nadie. Soy Valentina Smith, vivo en New York, hace dos años, ¿Por que? Porque...