Las Reliquias de la Muerte - Severus Snape.

El ascenso del Señor Tenebroso

Snape respiró el aire de tráfico y humedad cuando visualizó Charing Cross Road delante de él y el pub mágico más famoso de Gran Bretaña: Caldero Chorreante. Algunos muggles se detenían a mirar la pared destruida con curiosidad donde estaba la taberna mágica más famosa de Inglaterra. El profesor se aproximó hacia la puerta, apenas ondeando la capa por la grava y el pavimento, abrió la puerta y se encontró con un ambiente vacío. Tom, el desdentado y arrugado tabernero, estaba sentado en la barra agitando su varita sin prestarle mucha atención a lo que hacía.

-Tom -habló Snape desde las penumbras con voz clara y audible.

El tabernero se asustó tanto que cuando logró distinguir la figura de Snape, apuntó con mano temblorosa hacia él, cuya mano sostenía una varita. Snape caminó hacia él y Tom bajó la varita, aún temblando de pánico. El profesor nunca lo había visto tan arrugado y cabizbajo. La situación actual ya no traía tantos clientes, o eso supuso Snape tras ver un par de personas saliendo del callejón Diagon y cruzando el local con paso apresurado. Cuando vieron a Tom, se despidieron con una seca cabezada y siguieron caminando, como si el tabernero estuviera solo. Cuando Snape se aseguró con la mirada de que las personas salieron del local, volvió a dirigir su fría mirada a Tom, quien lo miró con la pupila dilatada por el miedo.

-¿Q-qué quieres, Severus? -inquirió el tabernero con voz temblorosa.

-Quiero información de Mundungus Fletcher -contestó Snape al acto. El hombre inclinó la cabeza y, de un salto, se dirigió hacia la parte de atrás de la barra y sacudió un poco la varita. El polvo amotinado en los vasos desapareció y la barra se limpió.

-Siéntate, Severus, si eres tan amable. Creo que el cocinero sabe algo, fue el último que lo vio en los límites del callejón Diagon y el callejón Knockturn -dijo Tom con la voz menos crispada por el miedo y se dirigió a una puerta ubicada al lado de las botellas mohosas de cerveza de mantequilla que estaban ubicadas en precario equilibrio sobre un taburete que fue ampliado con magia. Snape se sentó, le echó un vistazo al patio trasero de la taberna y pensó en lo que sintió hace muchos años cuando vino por primera vez y la expectación detrás de la pared de ladrillo. Tal vez, y seguramente Potter y el Señor Tenebroso pensarían lo mismo cuando vino por primera vez, fue la mejor sensación de su vida. Cuando Tom regresó, venía con un vaso de agua y se lo ofreció a Snape pero éste lo rechazó.

-¿Qué información tienes de Fletcher? -preguntó Snape mirando al tabernero directamente a los ojos. Snape era hábil en Legeremancia así que notaría si Tom mentía.

-Según el cocinero, una vieja bruja del ministerio lo atrapó vendiendo cosas ilegales -repuso Tom con voz queda, como si eligiera cuidadosamente sus palabras-. Después de que la bruja se quedase con algo, se fue a Hogsmeade. El cocinero dice que una fuente bastante fiable del pueblo le comentó que Mundungus está en Cabeza de Puerco, aunque no sé si está ahí ahora mismo, Severus. 

Snape se levantó y apuntó con su varita a Tom, quien, con la mirada desencajada y los ojos perdidos, abrió un poco la boca y cayó al suelo. No recordaría nada de esa conversación. Comprobó que el tabernero se haya desmayado y se dirigió a la cocina, donde repitió el proceso con el cocinero, quien también cayó al suelo. Severus hizo otro encantamiento para que nadie lo viera, borró sus rastros con magia y salió del Caldero Chorreante, donde cerró con sumo cuidado la puerta detrás de él y se desapareció nuevamente. Cuando salió del incómodo proceso de aparecerse, abrió los ojos ante su salón y se dirigió a la cocina. Cuando iba caminando, pisó un trozo de pergamino que no estaba ahí. Lo tomó y lo alisó, era una carta escrita con caligrafía de trazos regulares pero, al tiempo, parecía que estaba llena de nerviosismo:

Severus Snape:

                 La reunión para acordar los planes del ascenso del Señor Tenebroso tomara lugar en los próximos días. Agradecemos su puntualidad apenas note que la Marca Tenebrosa lo convoque.