No tienes por qué reaccionar al mundo, a todo lo que haya por hacer dile sí a la verdad, no importa en qué circunstancias te encuentres, con qué personas trates, a quién o a qué te dirijas, siempre di sí a la verdad y ella se encargará, de este modo puedes actuar sin generar fricción con el mundo, con lo que es.