Takeru

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A la mañana siguiente Mimi estaba adolorida, y no solo por haber dormido en el suelo dentro de una bolsa de dormir, sino también porque había pasado toda la noche llorando. Se veía fatal. Hikari sabía que tenía que encontrar la manera de animarla.

- Vamos Mimi, no te puedes quedar aquí todo el día. Tienes el mar, el sol afuera. Por favor Mimi levántate.

- No quiero verlo. No tengo ganas de verlos como ayer los vi.

- Por favor Mimi eres más valiente que esto.

- No quiero Hikari – Hikari puso los ojos en blanco e intentó un nuevo enfoque.

- Veamos ¿por qué estas así? – Mimi le lanzo una fría mirada – por lo de ayer, bien recapitulemos. Ayer no pasó nada entre Takeru y Catrina – mientras lo decía, ella misma intentaba convencerse – estuvieron juntos toda la tarde, lo cual es lógico y normal, ES SU INVITADA, pero fue todo.

- Estaban juntos y abrazados.

- Vamos, a mí también me abraza y eso no significa nada – a penas lo dijo, sintió un dolor inmenso

- ¿Entonces debo asumir que cuando me abraza a mí tampoco significa nada? – Hikari no supo que decir, así que decidió usar su última carta.

- Si te levantas, usare ese estúpido vestido rojo – Mimi se incorporó – ese vestido que te gusto en el centro comercial. Veras, volví y lo compre – "Takeru me acompaño" pensó – y ahora está en mi maleta – "lo usaría para decirle todo a Takeru" – y si te levantas lo usaré esta tarde.

Por primera vez Mimi sonrió y se levantó. Salieron de la tienda de acampar. Y cuando salieron la sonrisa de Mimi se borró al ver a Catrina y Takeru. Esta vez no estaban abrazados, solo estaban uno a lado del otro, pero fue suficiente para hacer que las dos amigas sintieran una punzada en el corazón.

- Vayamos a caminar – dijo Hikari

- Yo voy – gritó Miyako – ¿vamos Sora?

- Vamos – respondió Sora

Y comenzaron la caminata las cuatro chicas. Mimi y Hikari no hablaban, solo escuchaban. En Hikari eso era normal, pero no en Mimi. Y Sora no paraba de hablar de Yamato, su novio, estaba tan enamorada. Y Miyako se dedicaba a recoger pequeñas conchas de mar. Cuando escucharon una voz conocida.

- ¿Qué hacen? – les grito Yamato – ¡se están alejando demasiado del campamento!

- Solo caminamos – respondió Sora.

- Iremos con ustedes.

Y llegaron a su lado Yamato y Takeru. Cuando Mimi vió a este último tomo de la mano a Hikari y se adelantaron un poco. Así continuaron su caminata Hikari y Mimi a la cabeza, después Miyako entretenida en su recolección de conchas y Sora, Yamato y Takeru un poco más atrás platicando.

Continuaron así hasta que llegaron a una pequeña desembocadura. La más sorprendida fue Sora al ver pequeños pececitos, por lo que decidieron detenerse un poco. Hikari y Mimi se sentaron en unas enormes rocas para recibir el sol y sentir el agua en sus pies. Cuando Takeru se acercó a ellas, Mimi de inmediato se levantó y fue a donde estaban Miyako y Sora jugueteando con los pececitos mientras Yamato las miraba.

Takeru se sentó en una de las rocas justo frente a Hikari.

- Lo siento - comenzó Takeru.

- Estuvo llorando toda la noche – respondió Hikari sin mirarlo a la cara.

- En verdad lo siento mucho.

- Ella es mi mejor amiga, a ti te adoro, pero esto no es justo – "no es nada justo que nos hagas esto" – pensé que solo era una amiga, ¿qué cambió? – "¿que hizo ella para que cambiara?" pensó.

- No es lo que crees... - suspiró – veras ayer...

Takeru le contó todo lo que había pasado el día anterior. Él miraba directamente al mar mientras contaba su historia. Ella lo miraba fijamente por primera vez en mucho tiempo.

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TAKERU flash back

Catrina tomó la mano de Takeru y lo apartó un poco del grupo.

- ¿Todo bien Catrina? – preguntó

- Si, solo quería hablar un poco contigo.

- Bien, ¿cómo lo estás pasando?

- De maravilla, tus amigos son geniales.

- Lo sé, son los mejores.

- Tú eres el mejor - Catrina se acercó a él, se puso en puntas y lo besó – tú eres el mejor Takeru.

Takeru se separó un poco de ella. Sentía el calor en sus mejillas. Se quedaron un momento sin hablar ninguno se atrevía a romper el silencio. Fue Takeru el que habló primero.

- Catrina... yo... - suspiró – escucha...

- No. Takeru escúchame tú a mí. Me gustas mucho. Sé lo difícil que puede ser esto de la distancia. Pero... - bajó la mirada – Takeru eres diferente a los chicos que he conocido, cada vez que hablamos me haces sentir mejor, me haces sentir única. En realidad yo no creo en las relaciones a distancia, pero por tí lo intentaría. Sé que nosotros lo haríamos funcionar. Takeru no cierres tu mente a la idea. Por favor Takeru intentémoslo.

- Catrina, lo siento. Yo de verdad no puedo.

Catrina calvó sus hermosos ojos en los suyos y las lágrimas salieron sin que pudiera evitarlo, Takeru la abrazo y mientras lloraba sobre su pecho le preguntó:

- ¿Es por ella?

Takeru no dijo nada. Miró al frente y la vio. Allí estaba ella, mirándolo con los ojos bañados en lágrimas. Sintió un golpe en el corazón, se sintió tan miserable. Allí estaba ella llorando, era su culpa y no podía hacer nada.

Vio también a su mejor amiga, mirándolo de una forma que no lo había mirado antes. No pudo distinguir que era. No pudo descifrar que era esa mirada, pero le dolió.

- Sí, es por ella.

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- Y ¿entonces? – pregunto Hikari cuando Takeru termino de platicar lo que había pasado la noche anterior.

- No sé qué hacer Hikari.

- Está muy triste, lo que vio ayer...

- No es lo que parece

- Ella no lo sabe

Hikari veía fijamente a Takeru mientras él se concentraba en el horizonte. La escena era insufriblemente hermosa. Los dos sentados sobre enormes rocas a la orilla del mar, con el sol acariciándolos, uno frente a otro, tan cerca uno del otro. Ella lo miraba, se veía estúpidamente atractivo, Hikari se ruborizó ante esta escena tan maravillosa. El momento perfecto para hablarle de sus sentimientos.

- Hikari, tú sabes lo mucho que quiero a Mimi – dijo Takeru mientras volteaba para verla a los ojos.

Y con esas palabras la regresó a la realidad. Con esas palabras rompió la magia del momento. Con esas palabras le rompió el corazón.

- Habla con ella. Yo te ayudaré.

Amistad o amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora