Capítulo diez.

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Erick—¡Está bien!, ¡sólo tápate! —se quitó la camisa rápidamente, me la dió y me la puse. Logre mi cometido, verlo sin camisa. Miraba su torso perfecto, tenia unos abdominales matadores y definidos, sus hombros eran fascinantes y sus brazos descubiertos me hicieron morderme el labio inferior.

Itzel —si no te conociera...

Erick— nunca me cansaré de decírtelo, eres muy loca. Cuando lleguemos al aeropuerto compraremos ropa, no subiré al avión sin camisa.

TN—¡ah! Tú no puedes subir al avión sin camisa pero a Itzel y a mi nos iba a hacer subir casi desnudas.

Erick —Sé lo que intentas, por más que trates de desesperarme y que te vaya a dejar a tu casa enojado contigo no lo lograrás. Sé que serás difícil, pero no hay nadie a quien no pueda domar.

TN—Cuidado donde apuntas el látigo, no vaya a ser que te des a ti mismo—se me ocurrió otra idea malévola.

Erick —No te acerques tanto, tienes aliento a matutino

TN—no me hagas lanzar la camisa por la ventana.

Erick —No eres cap... Mejor ni lo digo.

Arremangué un poco la camisa dejando mostrar mis piernas, Erick las miro anonado, me acerqué a su rostro y quedamos a centímetros de distancia, sentí como su 'amigo' se ponía feliz, era justo lo que estaba tratando de lograr, no había hombre que no le causará eso y Erick no era la excepción.

Erick —¿Qué haces?—dijo nervioso.

TN—¿De que hablas?

Erick —¡Levántate! —me empujó —Itzel cárgala.

TN—Itzel es muy delicada, no puede cargarme ¿verdad?

Itzel —no, no puedo.

Erick—¡Lo siento! Pero yo ya no te puedo cargar.— se arrecosto en sus piernas.

Itzel —Erick, ¿qué te pasa?

Yo moría de risa por dentro.

TN—¡No iré de pie todo el camino!

Erick —¡Maldita sea! Siéntate en mis piernas,  ¡Pero estate quieta!— me senté.

TN—¡Uy Erick! Y dices que yo soy la mala hablada—Seguía sintiendo eso tan alegre.

Erick—¿Falta mucho?

Conductor — ya estamos cerca.

TN—Pero que desesperación por llegar —me quité la camisa, con una mano tapaba mis pechos y la otra abanicaba con la camisa, aquella zona se volvió más alegre.

Erick —¡Ponte la camisa!

TN—Hasta que lo admitas

Erick —¿Admitir qué?

TN—Lo que te está pasando ahorita.

Erick— ¿Lo que me está pasando? No entiendo.

TN—Se me cansa el brazo...

Erick—¡No sé  a qué te refieres!

TN—Ok, me verán todos los de seguridad y mis padres no estarán contentos por ello.

Erick —¡Es qué no sé de qué hablas!

TN—¡A la una...!

Erick—¡No lo hagas!

TN— A las... ¡dos!

Erick —____ por favor, enserio no te entiendo.

TN—¡y a las...!

Erick—¡Está bien! ¡Está bien! ¡Lo diré!

TN—¡Fuerte y claro!

Erick —Eres una psicópata.

TN—Dos y medio y...

Erick—¡Está bien! ¡Ya lo diré!

Todos los de seguridad lo miraban, Itzel y también yo. Erick trago saliva, presionó sus labios y empuño sus ojos.

TN—Estamos esperando...

Erick suspiro.

Erick—Me tienes excitado —susurro.

TN—¿Qué dijiste? No te escuche —fingí, Itzel moría de la risa.

Erick—No lo diré de nuevo.

TN—Tienes razón, también me deshare de la ropa interior.— tome el lastico de mi bikini.

Erick —¡Qué me tienes excitado!, ¡maldita sea!

Voten y comenten.
—Adriana.

Niña Mal- Erick Colón.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora