Niña Mal- Erick Colón.

Capítulo nueve.

TN—¡Maldita sea! ¿Me pusiste un rastreador en el trasero?

Erick —¡Pero que mala hablada eres! Chicos, entren y toménlas por las fuerza.

Itzel—¿Qué?

Itzel en bata y yo en ropa interior, entraron varios hombres vestidos de negro y muy fuertes y nos tomaron por la fuerza, nos subieron a sus hombros, tratamos de escapar pero era imposible.
Bajamos por el elevador hasta llegar a la recepción.

TN—¡Seguridad!

Erick —Ni lo intentes, ya saben lo que hicieron y no las ayudarán.

TN—¡Eres un idiota! —iba sobre los hombros de un tipo. Erick caminaba tras de él y mi rostro quedaba frente al suyo.

Erick—A pesar de haberte encontrado, me has impresionado esta noche.

TN—Impresionate con esto — le mostré mi lindo dedo.

Erick—Hermoso —le dió un beso.

Subimos a una limosina.

Llevamos mucha seguridad, me halagaba un poco.

TN—¿Cómo nos hayaste?

Erick—Tú, tú me impresionaste... De hecho no hiciste nada mal, todo estuvo tan planeado. Subirte a un auto ajeno, robártelo y deshacerte de él en un lugar lejos, cambiarte de look e irte a un hotel pagando con una cuenta anónima... Pero lo que si me sorprendió —rió.—¿hacerse pasar por lesbianas? Eso superó todas mis expectativas.

TN—Idiota —rodeé mis ojos.

Erick —De hecho, si hubieras estado tu sola te hubieras salido con la tuya.

TN—¿A qué te refieres? —señaló a Itzel —¿qué con Itzel?

Erick—Agradécele a ella —la miré.

Itzel —¿yo qué?

Erick—muéstrame tu teléfono —Itzel sacó su teléfono.

TN—¡Itzel andabas con tu teléfono!

Itzel—si, ¿por qué?

Erick—las rastreamos por medio del celular de ella... Tú fuiste lista y te deshiciste de él por completo.

TN—¿Itzel por qué lo tenias?

Itzel —nunca pensé que nos rastrearían por ahí.

Erick—la verdad tengo que agradecerte —le dijo a Itzel.

TN—¿a dónde vamos?

Erick—Al aeropuerto.

TN—¿Cómo que al aeropuerto? ¡No traemos maletas!

Erick —No sé preocupen, allá se usa la ropa del internado...y su castigo por lo que hicieron será ir así al aeropuerto.

Itzel — ¡Nos congelaremos  en Londres vestidas así!

Erick—Cuando lleguen se visten...ahora cállense y quédense quietas...¡y tú no intentes nada! —me amenazó.

TN—Itzel, debemos hacer algo —le dije en el oído.

Erick—¡___! ¡A partate de Itzel!

Conductor —Señor, Colón.

Erick —¿Qué pasa?

Conductor —ya casi llegamos a la estación donde esta Miller.

TN—Sólo haz lo que te diga y corres rápido cuando te diga. —Le susurré al oído a Itzel aprovechando que Erick estaba distraído.

Itzel —¿Qué tienes en mente?

TN—Un plan express... Actúa normal y molesta.

Erick —Pero la limosina está llena.

Conductor —Pues debe bajar a alguien.

Erick —No puedo bajar a alguien y dejarlo tirado en la calle, además todos viajaremos.

Conductor —Piense en algo rápido por favor.

Erick —Ok...¡ ___ que te dije!

TN—Sólo estábamos hablando paranoico.

Conductor —ya llegamos.

Un tipo abrió la puerta de la limosina.

Erick—____ ven acá.

TN—¿Dónde?

Erick —Tendrás que sentarte en mis piernas.

TN—¿Cómo por qué o qué?

Joel —Lo haces y ya.

TN— tú me pides explicaciones a mi pero yo si las pido no me las das.

Erick—Necesitamos meter a una persona más y ya no hay espacio a menos de que una sea cargada.

TN—¡O que una persona se salga!,  ¡Me ofrezco! —me levanté.

Erick —¡Olvídalo, ven acá!

TN—¡No!

Erick— entonces cargaré a Itzel... Ven Itzel.

TN—¡No! —Todos se me quedaron viendo — me refiero a que... No le daré  ese trago amargo a mi amiga.

Erick —Como digas, ven.

TN—¡Ven tú!

Joel —Qué loca eres —se levantó y se sentó donde yo estaba y me senté sobre sus piernas, la otra persona entro. Íbamos a camino al aeropuerto.

Yo estaba dándole la espalda a Erick y se me ocurrió una idea malévola para vengarme de él. Me voltee, él me miró curioso, pero como supuse no evito mirar mi cuerpo ya que estaba en ropa interior.

TN—¿Qué miras?

Erick—nada — volteó la mirada.

Desabroche mi sostén y lo lancé lejos, Erick abrió sus ojos como dos platos.

Erick—¿Qué haces?

TN—me quito la ropa.

Todos los tipos de adentro me miraban, pero yo me tapaba con mi brazos.

Erick—¡Eres una loca, te están viendo!

TN—dame tu camisa.

Erick—¡Qué!

Itzel —¡____! ¿Por qué te desnudas?

TN—Si no quieres que ande desnuda, dame tu camisa.

Erick— pero no traigo otra de abajo — sonreí.

TN—Se me están cansando los brazos —baje uno.

Voten y comenten.

—Adriana.