Familia

segundo round #4

Las personas presentes seguían su disputa, cada vez la situación se ponía más tensa. Personalmente no le daba la razón ni a mi papá ni a mi mamá, mas sin embargo me sentía culpable, sabía que toda aquella guerra era provocada por mis acciones. Todos estábamos mal, habíamos cometido miles de errores pero preferíamos gritar los desaciertos que tenían los otros miembros de esta podrida relación, que encontrar nuestras malas acciones y tomar responsabilidades por ellas.

-¿Te la das de héroe ahora? -Continua mi mamá viendo a mi papá a la cara -cada vez que hay que llevar los muchachos porque tienen que ir a una cita en el psicólogo o ir para las clases yo era la que estaba pendiente. ¡A mí es a la que llaman! En el liceo cuando el muchacho lleva la Camisa por fuera o lleva los zapatos de otro color. Además desde que te fuiste para allá arriba no sabes cuánto el muchacho tiene que pagar en el odontólogo o cuántas papas se come al día...

-¡Primero la que necesita ayuda profesional eres tú!- Le interrumpe mi papá -Además la que llevaba a los muchachos a al médico era Kenny, la que limpiaba la casa era Zara y después Kenny, la que estuvieron atendiendo a mis hijos y lavando la ropa y preocupándose por la casa eran la muchachas que trabajaban acá. ¿Que hacías tu? veías los resultados escolares para tratarlos mal no solo física sino verbalmente.

- ¿Por eso era que amabas a Kenny no? Yo se que te acostabas con ella ¡Esta vieja es una bruja Kenny, por eso me acuesto contigo!

-¡Ah! ¿Con que lo sabías? ¡Entonces eres rolitranco de cabrona! - Mi viejo actuaba de una manera muy sarcástica - ¿Que estabas esperando con lo que hacías? Estábamos separados sexualmente desde hace mucho tiempo y metiste a esas muchachas en la casa ¿Con qué fin si yo trabajaba el Kiosco? Cuando llegabas a Catia para que me fuera a ponerle cerámica a al primer piso. ¡Me la pones en bandeja de plata! no tenemos ninguna relación conyugal porque ni siquiera hablamos más que de negocios, la llevas para la casa y me dejas todas las libertades del mundo. Lo hacías para descubrirme en algo y perder todo derecho a los bienes matrimoniales ¿Pero crees que me chupo el dedo?

Dios yo no te pedí esto... Lo se Xuka debí haber sido un malnacido en mi vida pasada para tener que lidiar con una familia tan pesada. Pero de verdad yo no pedí nacer, creo que hubiera sido más feliz si me hubieran dejado en un container o en el hospital ¿Porqué tengo que estar en medio de toda esta basura? Solo de recordar esta clase de conductas me dan ganas de salir corriendo, de escapar, de no saber más nada de ninguno de ellos...

-Cambiando de tema Eliberta - Ahora la palabra la tenía mi hermano -¿Tú sabías que Daniel intentó suicidarse una vez por tu falta de tacto? ¡Además! ¿Que querías sacarle a Daniel cuando le rompiste la cara? Casi le sacas un ojo ¿¡sabias!? Dime porque le compraste los breakers si luego quieres sacarlos... ¡No debiste comprarle nada!

-Lo que le quería sacarle era la lengua - responde mi mamá -Estaba tan molesta por su falta de respeto que por dios lo iba hacer si Daniel no se hubiera defendido te aseguro que lo hubiera hecho

- Sabes que no te voy a responder. Me das asco- después de decir estas palabras el gordo se voltea y me dice -Para la próxima vez no le digas que agarre el kiosco y le eche bastante mantequilla si no que se lo meta por el trasero...

-¡hermano te voy a agradecer que no sigas insultando a mi mamá al menos en frente de mi- Al fin sale mi hermano a defender a mi madre -Si crees que Daniel es la Maravilla que dices, llévatelo pues y críalo como tu quieras, si crees poder cuidarlo mejor que su propia madre.

- ¡A eso vine perro! Pero déjenlo en paz o se la verán conmigo...

Hubo una cosa que estuve de acuerdo con mi papá. Mi madre nos maltrataba solo físicamente, los peores golpes eran verbales. Cuando el gordo mencionó que me quería suicidar, fue porque en aquellos momentos tenía 12 años aproximadamente unos, meses antes de este enfrentamiento Kenny se fue de la casa. Ella tiene una hija con la cual jugaba llamada Raquel. Le agarre tanto cariño que al momento de partir le regalé todos mis carros de colección y muñecos estos a su vez me los habían regalado mi mamá y otros familiares sus palabras cuando se entero fueron las siguientes:

-Tú no tienes nada que regalar, porque nada de lo que tienes te pertenece. Ni tus ropas ni tus estudios, tampoco tus juguetes. ¡Tú no tienes nada! ¿Sabes Por qué? Porque ni siquiera tu vida te pertenece, ya que yo te parí así que de ahora en adelante, no regalas nada sin que yo te lo permita ni harás nada sin que yo lo ¿sepa de acuerdo?

Esto vino acompañado de unos buenos combos de golpes... Esa noche no puede dormir grite como todo un imbécil. No estaba en mi sano juicio pensaba, si esta vida no es mía y no puedo hacer lo que quiero ¿para qué vivo? Pero fui tan cobarde (Gracias a dios) que no hice nada estúpido. El día siguiente comencé a fumar cigarrillos, recuerdo hablar con mi hermano el me dijo unas palabras que jamás se me olvidara...