Capítulo 16: Las espinas de las rosas.

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Una vez mas como ya se había acostumbrado a hacer, Judit estaba durmiendo a brazos de James. Era domingo, con lo cual James había decidido que hoy no saldría a correr tan temprano, así podría disfrutar por mas tiempo de ver dormir a Judit. Parecía completamente un ángel durmiendo, tenía su cara angelical con una leve expresión de felicidad, que a James le valía para darle los buenos días. James sin ser consciente de ello se volvió a dormir mientras observaba cada gesto y gruñido que emitía Judit. Cuando volvió a abrir los ojos después de sentir una intimidante mirada, se chocó con la dura mirada de un padre furioso al ver a su inocente hija a brazos de un hombre mayor que podría dañarla, veía a su hija como una muñeca de porcelana y a él como el martillo que podría destruirla y partirla en mil pedazos con tan solo dos palabras.

La mirada de odio del padre de Judit le inmovilizó completamente. Al mismo instante Judit abrió los ojos encontrándose a su padre mirando fijamente a James.

-¡Papá! ¿Qué haces aquí ya?

-Quería que mi hijita me explicase el por qué en todas partes se encontraba una foto de ella semidesnuda, además echaba de menos a mi princesita, con lo cual había decidido volver antes de hora, he entrado en silencio para darte una sorpresita, pero al ir a tu habitación no estabas, así que creí que James sabría algo sobre donde estabas, pero veo que él tiene clarísimo donde estás.

-Papá no es lo que tú crees...

-¿No? ¿No estás en la cama con el hombre que contraté expresamente para evitar esto? ¿No estás en la cama del guerdaespaldas que contraté para vigilarte, pero no tan de cerca? Yo diría que sí. Que has hecho todo lo dicho.

-Sí, pero papá...

-No necesito explicaciones. -Dice el padre decepcionado. -Creo que está todo muy claro. -Se va cabizbajo sin añadir una sola palabra mas.

Judit sintiéndose mal por lo sucedido se levanta de la cama, James quien había estado inmóvil todo el rato decide añadir algo.

-Supuse que acabaría pasando, pero no esperaba que fuese tan de repente... Lo siento Judit.

-Lo siento yo... una vez mas he sido una egoísta que solo he pensado en mi propio bien, y te he acabado metiendo a ti en líos.

-Esta vez no me has metido tú en ningún lío, me he querido meter yo, y sigo sin arrepentirme, porque por ti me metería en mil líos mas si hiciese falta. Judit, me has enseñado a valorar los pequeños detalles de la vida, créeme que esto ha merecido la pena.

Judit sin poder contenerse mas se abalanza sobre James. Aunque sabe que las cosas están muy tensas en casa ahora mismo, necesita enseñarle a su padre el valor que tiene James para ella, y lo que él ha hecho por salvarla del pozo sin salida en el que se encontraba. Y al fin, gracias a James había visto la luz.

El día se había basado en un concurso de saber quien evitaba más la mirada a quien, Judit no miraba a su padre, su padre no miraba a James y James evitaba mirarlos a ambos. El silencio había invadido una casa que desde el nacimiento de Judit jamás se había conocido. Adela estaba en la cocina, evitando entrar en el salón donde la tensión estaba a punto de estallar. El teléfono de Judit rompió el silencio sonando con tanta fuerza que le obligó a contestar. Todos quedaron pendientes de ella, quien cambió su expresión de odio por una de felicidad, Álex se había convertido en su representante, y era él quien llamaba para anunciarle que diferentes empresas de modelaje querían contratarle y que debía reunirse con él inmediatamente. Judit sin contar con su padre aceptó y rápidamente se levantó con intención de irse.

-¿Dónde vas? -Le para su padre.

-A...

-A ninguna parte. Estás castigada.

-¡NO! No estoy castigada, ni puedo estarlo, te has largado durante meses de esta casa, sin avisarme, sin decirme una sola palabra, ¿Y sabes qué? Me has dado una libertad, la libertad de decidir, tengo dieciséis años, la edad a la que una niña no debe quedarse sola en casa, me has obligado a madurar, y lo has conseguido, he madurado, he conseguido trabajo, no necesito de tu dinero para vivir, si te has largado durante meses, ahora mismo no tienes ningún derecho de volver y tratarme de nuevo como una niña pequeña porque no te gusta la relación que tiene tu hija con un hombre al que tú obligaste a venir con tus irrechazables ofertas. Así que sí, me voy, me voy a cumplir mi sueño, a hacer mi trabajo. James, vamos.

-De acuerdo, vete, James, estás despedido.

A Judit le recorre un escalofrío que le sube por la nuca erizándole el vello que le nace ahí mismo. La palabra "despedido" le duele y mas sabiendo que va para James por su culpa.

Sin embargo a James no le duele y se levanta enseguida para llevarla donde quiera.

Ambos suben al coche y James conduce hasta donde Judit le indica. Ninguno de los dos rompe el silencio hasta que llegan donde Judit había dicho.

-¿Por qué lo has hecho? -Interrumpe Judit.

-¿El qué?

-Traerme.

-Judit no pienso interponer mi trabajo a ti. Mereces entrar en esa oficina y aceptar la oferta que mejor te convenga. Me has enseñado muchas cosas, entre ellas a vivir el momento, de verdad, no me arrepiento haber estado contigo, pero en unos meses mi trabajo se iba a terminar, y con ello nuestro, la vida es dura Judit, es dura e injusta, pero no pienso ser el culpable de que tú no te asegures una carrera futura en el mundo del modelaje, eres un ángel, créeme, tu apariencia es la de un ángel, tienes mucho futuro aquí, lo nuestro ha estado muy bien y no me arrepiento ni un segundo de lo que hemos tenido, pero los dos sabíamos que esto iba a terminar.

-James... ¿Me estás dejando?

-Sí Judit, me duele mas esto a mi que a ti, pero no podemos estar juntos, al menos ahora.

-¡James por favor! No lo hagas... No me dejes.

-Judit, lo nuestro no es posible. Necesito que lo entiendas.

-Lo entiendo perfectamente, te has vendido a mi padre. -Después de soltar eso Judit se baja del coche dando un portazo. -¿Qué irrechazable oferta te ha propuesto ahora? -Le grita desde el otro lado del coche, y largándose sin mirarlo una sola vez mas.

-¡JUDIT! -James se queda llamándola desde el coche, pero la indignación de Judit le obliga a hacer oídos sordos a la llamada de James. James siente que no puede irse y dejar a Judit creyendo que su padre le ha comprado.

Hola!!! Capítulo 16 ya! Como va? Os está gustando? Espero que sí. Una semana más muchas gracias por seguir leyendo 💕

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