Capítulo 4

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Despierto sintiendo unas incontrolables ganas de vomitar, me levanto de mi cama y corro en dirección al baño, el vómito invade mi boca y la cubro inmediatamente con mis manos, el camino se me hace eterno y por mucho que intenté evitarlo dejo rastro de vómito en el camino.

Al llegar al baño no me da tiempo de encender las luces y caigo de rodillas frente al váter, expulso todo abandonando la cena y mi maravillosa pizza, mi corazón se acelera  y comienzo a sentirme mareada.

Acabo con mi suplicio,  y me siento apoyando mi espalda en la pared, cierro mis ojos sintiéndome totalmente débil, el mareo no desaparece y comienzo a sudar, lágrimas salen de mis ojos y no sé realmente porque.

Cuando el mareo para, halo la cadena del váter dejándolo asi limpio y sintiendo la debilidad de mi cuerpo me arrastro por el pasillo para poder limpiar los restos de vómito que dejé, me alegra no haber despertado a mis padres, siempre se preocupan de mas y me llevan a la clínica

- ¿Qué está haciendo señorita Madeley? - casi me da un paro al escuchar la voz de la señora Londoño

- So..solo intento lim...limpiar - hablo con dificultad

- Deje éso ahí, esta sudando señorita, llamare al señor y la señora Orang

- No - niego rotundamente - por favor.... N..no l..los preocupe - me siento agitada al hablar - si m...me quiere ayudar ... Sólo... ayudeme a lim...limpiar - ella niega

- Yo limpiaré eso, pero me preocupa su condición señorita Madeley

- Entonces.. ayudeme a llegar a m..mi cama.. sólo necesito des...descansar - ella asiente y me ayuda a ponerme de pie, pasa mi mano por su hombro y a pasos lentos llegamos a la habitación, con cuidado me pone sobre la cama y me acomoda, le pido que me cubra con las sábanas pues a pesar de estar sudando tengo demasiado frio, ella lo hace .

- iré a limpiar señorita Madeley, ahora  vuelvo - yo asiento y ella se va, la veo salir por la puerta, desvío mi mirada hacia la cama de Lindsay y entonces descubro que se quedó dormida con los auriculares puestos, eso explica porque no despertó mientras vomitaba.

Miles de pensamientos inundan mi mente, mi corazón no deja de palpitar con rapidez, pero ya estoy acostumbrada a esto, soy consciente que  he estado esforzando mi cuerpo de más, cierro mis ojos intentando relajar mi cuerpo, siento un dolor leve de cabeza y me empiezo a desesperar, nuevamente se inundan mis ojos de lágrimas pero me niego a llorar, decido intentar dormir y no pienso en nada mas.

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Abro lentamente mis ojos sintiendome relativamente mal, intento acostumbrarlos a la luz , miro la cama de Lindsay y ésta está vacía - ¡Rayos! Me quedé dormida - me levanto con rapidez pero un fuerte mareo me hace ir las luces y caigo a la cama.

- Quédate quieta - escucho la voz de mi madre, ni tan siquiera habia notado su presencia - Lindsay se fue a estudiar hace 2 horas, tienes fiebre Madeley, ¿porque no dejaste que la señora Londoño nos despertara ayer? - la miro con culpa - estás pálida

- Lo siento ma' , sólo no queria preocuparlos - ella asiente y acaricia mi rostro con la delicadeza que solo ella puede tener

- Llamare al doctor ya que no quieres ir a la clínica, tu papa no fue a trabajar

- ¿Por que?

MadeleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora